El proyecto de transformación urbanística de la Calle Tours, en el barrio de La Albuera, continúa avanzando tras la reciente apertura del expediente administrativo y la revisión de los costes de urbanización. La actuación, que busca reorganizar el suelo, mejorar la conexión viaria y crear nuevos espacios residenciales y públicos, también ha generado debate político en el Ayuntamiento.
Esta semana el alcalde, José Mazarías, ha autorizado finalmente la apertura del expediente, tras el recurso interpuesto por el PSOE ante la justicia debido a la negativa inicial por parte del Ayuntamiento a permitir la consulta de los documentos, por lo que reclamaban acceso completo a la documentación “para garantizar la transparencia y el control político sobre el proyecto”. De esta forma se facilita el acceso completo a los documentos, permitiendo la revisión de los convenios y costes asociados. Esta decisión se tomó antes de que se dictara una resolución judicial con el fin de evitar más conflictos entre el ejecutivo y la oposición.
Según explicaba el alcalde el pasado jueves, el conflicto surge durante el gobierno socialista, cuando algunos propietarios solicitaron la revisión de los costes de urbanización, argumentando que los importes finales superaban ampliamente lo inicialmente previsto. Un desacuerdo que ha sido llevado a los tribunales por parte de los propietarios y que ha ido demorando la necesaria urbanización de la zona.
No obstante, el actual concejal de Urbanismo, Alejandro González Salamanca, ha informado de que el proceso se ha paralizado temporalmente con el fin de permitir una negociación entre las partes. Respecto a esto, el concejal ha agradecido la “buena voluntad” de los propietarios para llegar a acuerdos y facilitar un proceso que mejoraría las condiciones de la zona.
Para González Salamanca, lo más importante es “acabar la urbanización de la calle Tours y resolver un problema enquistado desde hace años”, según explicó.
El proyecto, que afecta a una extensión de alrededor de 14.000 metros cuadrados, implicaría una conexión con la calle Valencia, acabando con el ‘fondo de saco’ actual y creando cerca de 90 plazas de aparcamiento.
