La Gimnástica Segoviana cayó derrotada en el campo del Burgos en un partido en el que los locales demostraron su condición de líderes y pasaron por encima del equipo de Paco Maroto. Txitxo, centrocampista blanquinegro, se erigió ayer en verdugo del conjunto segoviano al lograr los dos goles del Burgos; el primero desde el punto de penalti, y el segundo con un magnífico cabezazo ante el que nada pudo hacer Durán.
El Burgos salió decidió a encarrilar el partido sabiendo que su máximo rival, el Valladolid B, había ganado ayer y necesitaba una victoria para mantener los cinco puntos de diferencia. Por su parte, la Segoviana, con pocas opciones de clasificarse para la fase de ascenso, no se planteó el partido con un férreo sistema defensivo, sino que Maroto alineó un equipo que buscó desde el primer instante la portería local. Sin embargo fue el Burgos el que tuvo más acierto en esos primeros compases del encuentro, con una primera jugada peligrosa a los 6 minutos, con un pase en profundidad de Espinosa hacia Nel que Durán se encargó de desbaratar.
Dos minutos más tarde los locales protestaron un posible penalti sobre Espinosa y en el minuto 20 el colegiado leonés Ruiz Sánchez sí concedió una pena máxima a los burgaleses por un claro derribo de Ferrero sobre Txitxo. EL propio centrocampista local se encargó de transformarlo para abrir la cuenta blanquinegra.
En la siguiente jugada, el propio Txitxo acertó a rematar de cabeza dentro del área a falta botada por Zazu. Con el partido decantado, la Segoviana intentó adelantar sus líneas para acercarse a la portería de Aurreko y el primer disparo con cierto peligro llegó a la media hora de juego. Ocho minutos más tarde un cabezazo de Calleja hizo nuevamente intervenir a Aurreko. Pero la reacción de la azulgrana fue un espejismo, y otra vez apareció el Burgos en la recta final de la primera parte tomando posiciones en el centro del campo y pasando a dominar el partido.
En el minuto 41 Nel de cabeza y tras un saque de esquina a punto estuvo de ampliar la renta para los suyos; y en el 45 Jónathan, en un libre directo, mandó el balón rozando el poste de la portería defendida por Durán. El propio Nel, al borde del descanso, dispondría de la última oportunidad al presentarse solo delante de Durán, que realizó una gran intervención lanzándose a los pies del delantero para evitar el tercer tanto.
En la segunda mitad la Segoviana salió dominando y presionando a su rival, haciéndose con el control del partido. Por su parte el Burgos, con los dos goles de ventaja, se dedicó más a defender y a esperar más las acometidas gimnásticas, muy seguro de su valía defensiva y de la dificultad del equipo de Maroto de acercarse con peligro al área defendida por Aurreko.
La primera ocasión visitante se produjo en el minuto 61 con un tiro cruzado de Fran que se marchó fuera. El dominio visitante se acrecentó con la expulsión por doble cartulina amarilla de Urbano en el minuto 73. De esta manera, en el 81, Roberto lo intentó desde lejos con un disparo muy duro que se marchó por encima del travesaño de Aurreko; y tres minutos más tarde De la Cruz, dentro del área, recogió un balón suelto, pero su disparo salió muy desviado.
El Burgos, en los instantes finales y jugando a la contra, pudo rematar el marcador con un disparo alto de Manel Sala ante la salida a la desesperada de Durán.
