La Gimnástica Segoviana ya acumula siete partidos seguidos sin perder, después de su trabajado triunfo de ayer (1-0) ante un Santa Marta que no les puso las cosas nada fáciles a los azulgranas. La lluvia estuvo presente en todo momento, aunque no deslució el choque en un campo de La Albuera en perfecto estado, a pesar de la nevada caída durante el día anterior.
Los segovianos salieron muy animados hacia la portería contraria, entrando por ambas bandas e intentando sorprender con disparos desde lejos. Por su parte, a los salmantinos les costaba sobrepasar el centro del campo en el inicio.
Fue en una jugada desde la derecha cuando llegó la primera ocasión clara del partido para los locales, en el minuto 5 y por medio de un remate de cabeza de Mariano, que se fue fuera por poco.
Seguidamente, el peligro se trasladó a la portería contraria, con un saque de falta del Santa Marta despejado por la defensa; y, en la jugada siguiente, con el lanzamiento lejano de Jorge, bien colocado, pero que Iván evitó que se convirtiera en gol gracias a una buena estirada.
Tras este par de acciones el encuentro se abrió, viéndose a un Santa Marta con más mordiente ofensiva. El balón iba de un lado a otro, como en un partido de tenis, sin dueño, cuando se cumplió el primer cuarto de hora.
En cuanto a las oportunidades de gol, estaban escaseando, hasta que el local Roberto remató de volea un balón que se marchó como un obús a las manos del guardameta Darío.
Llegados al minuto 20 fueron los salmantinos quienes llevaban ahora el peso de la posesión, pero pronto volvió a ser de la Segoviana, aunque sin crear demasiado peligro en ataque. Por su parte, el equipo visitante volvió a obligar a que Iván actuase, despejando a corner un fuerte disparo de Carlos desde lejos, pero con mucha intención.
Cerca de la media hora, los gimnásticos dispusieron de un contragolpe que acabó en corner. Y de este saque de esquina nació el 1-0, obra de Anel tras recoger un balón suelto dentro del área pequeña.
Este gol llegó como el maná para una Gimnástica Segoviana que veía cómo el rival se estaba viniendo arriba. Los salmantinos no se amilanaron tras recibir este tanto, y continuaron intentándolo con buen criterio, y sin renunciar al disparo desde cualquier posición, al igual que estaban haciendo los de casa por medio de Roberto, Asier y James, siempre viendo puerta.
Tras los últimos arreones de ambos equipos, se llegó al final de la primera parte.
En la reanudación se siguió con el mismo guión. La lluvia no paraba de caer, por lo que los jugadores tenían que trabajar el doble para mantener la verticalidad sobre un césped de La Albuera que, a pesar de todo, aguantaba estoicamente el chaparrón.
Por lo demás, las ocasiones de gol brillaron por su ausencia aunque, tal y como estaba transcurriendo el partido cualquier acción aislada podía suponer peligro.
En el 58 Santi Sedano hizo su primer cambio de la tarde, metiendo a Iker por Dani Arribas, de manera que Mariano ocupase la posición de delantero centro e Iker, la de mediapunta. De todas formas, 5 minutos después Mariano abandonó el campo con molestias musculares, dejando su lugar a Javi
La siguiente ocasión clara de los gimnásticos la protagonizó Rubén, con un tiro lejano en el minuto 72. Seguidamente, una salida en falso del portero Iván estuvo a punto de darle un disgusto a los locales. El mismo Rubén lo iba a intentar desde lejos, en el 76.
Pero quien tuvo la más clara para lograr el gol de la tranquilidad fue Javi, que se plantó solo delante del portero en el minuto 82, pero al rematar a puerta el guardameta le adivinó las intenciones.
En el tramo final los visitantes tuvieron oportunidades para empatar, pero la defensa azulgrana estuvo muy atenta para despejar el peligro.
