Cerca de 200 países se reunen desde ayer en París para llegar a un acuerdo que, al menos, fije el objetivo de limitar a 2 grados el aumento de la temperatura global del planeta a final de siglo, de acuerdo con las recomendaciones del Panel de Expertos de Cambio Climático de la ONU para evitar que las consecuencias de este fenómeno inducido por el hombre sean catastróficas e irreversibles para la Tierra.
La Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático de la ONU, que tendrá hasta el 11 de diciembre, deberá además conseguir aunar voluntades y líneas rojas de todos los países del mundo y lograr evitar cualquier veto a un acuerdo.
El presidente del país anfitrión, François Hollande, aseguró en su discurso inaugural que la lucha contra el terrorismo y contra el calentamiento global están “estrechamente relacionadas”, y añadió que para alcanzar el objetivo de reducir el cambio climático es necesario un acuerdo “universal, diferenciador y vinculante” en el que los países más ricos colaboren más que los países más pobres.
Los dos países más contaminantes del planeta, China y Estados Unidos, prometieron trabajar juntos para un acuerdo que garantice una “economía global baja en dióxido de carbono” este siglo. Al inicio del encuentro bilateral entre el presidente norteamericano, Barack Obama y el mandatario chino, Xi Jinping, Obama expresó que la decisión de ambos de hacer sus propias promesas de reducir las emisiones el año pasado ayudó a empujar a otros países a que hagan lo propio.
“Como las dos mayores economías del mundo y los dos mayores emisores de dióxido de carbono, ambos hemos determinado que es nuestra responsabilidad emprender acciones. Nuestro liderazgo en esta cuestión ha sido absolutamente vital”, afirmó.
Según Obama, los dos países trabajarán juntos en las conversaciones para alcanzar un acuerdo que saque adelante una economía mundial baja en dióxido de carbono este siglo y un apoyo financiero “fuerte” a los países en vías de desarrollo para que se adapten al cambio climático.
Al respecto, opinó que India debe reducir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera mientras promueve el desarrollo económico y trata de combatir la pobreza. Tras una posterior reunión con el primer ministro indio, Narendra Modi, Obama aseguró que tanto él como su homólogo indio creen que el cambio climático es una “amenaza urgente” y que India tiene que ser capaz de crecer económicamente.
Uno de los impedimentos para conseguir un acuerdo que pueda combatir el cambio climático es la renuncia de EEUU a aceptar que algunos países sean obligados a trabajar contra el fenómeno más que otros, mientras que India se opone a las restricciones que impiden que su país pueda potenciar su desarrollo económico.
Por su parte, China estudia lanzar satélites para monitorizar sus emisiones de gases de efecto invernadero con el fin de reducir la contaminación. Xi Jinping advirtió además que se deberían tener en cuenta las “diferencias” económicas entre países de cara a la negociación de un acuerdo final, en la línea de su mensaje habitual que defiende que los países desarrollados deben asumir una mayor responsabilidad por el calentamiento del planeta.
No obstante, el presidente chino defendió la importancia de los esfuerzos emprendidos para combatir el cambio climático y garantizar un futuro sostenible.
Coincidiendo con la Cumbre del Clima, el Banco Mundial lanzó ayer un programa de comercialización del dióxido de carbono. Dicho plan, conocido como Iniciativa de Transformación de Activos de Carbono (TCAF) y que recompensará a los países por reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero pagándoles una cantidad por cada tonelada menos de CO2 que emitan a la atmósfera, se iniciará el año que viene con una doración inicial de 250 millones de dólares (235 millones de euros) dados por Alemania, Noruega, Suecia y Suiza, aunque el Banco Mundial espera que las aportaciones alcancen los 500 millones de dólares (471 millones de euros).
