El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton ‘Ash’ Carter, acusó a las fuerzas iraquíes de dejar en manos de Estado Islámico el control de la estratégica ciudad de Ramadi al demostrar una total falta de voluntad a la hora de combatir a los yihadistas.
“Podemos entrenarlos, podemos darles equipamiento, pero lo que no podemos hacer es inculcarles la voluntad de luchar”, manifestó Carter en una entrevista concedida a la cadena estadounidense CNN. Según los datos que baraja el Ejército estadounidense, los soldados iraquíes “nunca estuvieron en inferioridad numérica” frente a las fuerzas de Estado Islámico. “De hecho”, puntualizó Carter, “superaban ampliamente en número al enemigo, y aun así se negaron a combatir hasta que decidieron abandonar el lugar”.
Contraofensiva
Asimismo, el combinado de fuerzas iraquíes compuesto por soldados, milicias chiíes y grupos paramilitares suníes consiguieron avances en su contraofensiva para recuperar la estratégica ciudad de Ramadi de manos de Estado Islámico, asumiendo la cercana ciudad de Husaiba, a 10 kilómetros de distancia.
“Hemos recuperado el control de esa ciudad y estamos planeando nuevos avances para hacer retroceder aún más a los combatientes de Daesh (Estado Islámico)”, declaró el líder tribal Amir al Fahdawi. “La moral de los combatientes es elevada tras conocer la llegada de refuerzos y mucha munición”, añadió en este sentido.
El plan más inmediato consistió en bombardear las posiciones de Estado Islámico en la orilla contraria del Eúfrates, donde las milicias yihadistas lanzan proyectiles de mortero.
