En pocos años, casi 55.000 metros cuadrados de edificios del casco antiguo de Segovia quedarán en desuso. Así lo indicaba el estudio, realizado a finales del pasado año, por la demarcación en Segovia del Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla y León Este (COACYLE), en el que los profesionales segovianos consideran al PEAHIS como el instrumento fundamental para revitalizar el casco antiguo, aquejado además por un envejecimiento de la población.
Los arquitectos plantean que estos inmuebles deben tener un uso y contenido para dinamizar la vida y actividad del recinto amurallado y frenar su actual situación de «aletargamiento».
Entre los edificios en desuso, infrautilizados o abandonados, los arquitectos citan el antiguo acuartelamiento de Sancti Spíritu (Intendencia), la Casa de la Tierra, el antiguo Hospital Policlínico, el Palacio de Mansilla, la Escuela de Magisterio o el Convento de las Jesuitinas; mientras que, según dicen, otros edificios que «a medio plazo» pueden quedar vacíos, como el edificio del INSS y de la Tesorería de la Seguridad Social, que se trasladará a un nuevo inmueble en el barrio de Ciudad y Tierra, la actual Biblioteca Pública (el nuevo edificio se construye en Nueva Segovia), o el Palacio de Justicia, que igualmente se proyecta a las afueras, junto a la avenida de Gerardo Diego.
El estudio confirma el envejecimiento de la población del recinto. El 53% de sus habitantes tiene más de 45 años, mientras que apenas el 10% tiene menos de 16 años. En la última década, la cifra de población ha sufrido una significativa disminución, pasando de los 4.200 habitantes en el año 2000 a los 3.925 del año 2013.