La operación policial en Saint Dennis en busca del presunto cerebro de los atentados de París ha concluido y se ha saldado hasta el momento con dos muertos, uno de ellos una mujer que se ha inmolado, y siete detenidos, según han confirmado el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, y el fiscal general, François Molins, en el lugar de los hechos.
En una breve declaración a la prensa, Molins ha explicado que se ha actuado ante la sospecha de que en el apartamento pudiera estar Abdelmahid Abaaoud, si bien su presencia no ha podido confirmarse, y ha indicado que por ahora «es imposible» revelar las identidades de los detenidos.
Uno de los fallecidos es una mujer que se ha inmolado era prima del presunto cerebro de los atentados de París y tenía nacionalidad francesa, se llamaba Hasna y tenía 26 años. La joven, que se ha convertido en la primera kamikaze en Europa, nació en 1989 en Clichy la Garenne, en la región de los Altos de Sena.
Según los medios franceses, la mujer habría realizado una llamada telefónica antes de inmolarse, por lo que los investigadores sospechan que podría haber alertado a sus cómplices.
Por su parte, el hombre que había alojado a los detenidos en el apartamento -en el operativo han sido detenidas siete personas, dos de ellas en el interior del mismo- ha revelado a los investigadores que había alojado a otras tres personas, cuyo paradero se desconoce.
Además, fuentes policiales han revelado que los detenidos pretendían atentar este mismo jueves en el distrito financiero de La Défense, en París.
Tras la pista de los fugados. Esta tarde se ha sabido que uno de los ocho terroristas que el pasado viernes atentaron en distintos puntos de París, dejando 129 muertos y más de 300 heridos, tendría un cómplice con el que habría atravesado los Balcanes rumbo a Europa Occidental, de acuerdo con fuentes de Inteligencia.
Ahmad al Mohamad se inmoló junto al estadio de fútbol de Saint Denis en el inicio de la cadena de ataques terroristas que sacudió la capital francesa en los peores sucesos ocurridos en el país europeo desde la Segunda Guerra Mundial.
Junto a su cadáver las fuerzas francesas encontraron un pasaporte perteneciente a Ahmad al Mohamad, de la ciudad siria de Idleb y 25 años de edad, aunque aún no está claro si esta es realmente su identidad o si, por el contrario, se trata de un pasaporte falso, robado o comprado.
