El Leche Mesenor Nava se movió entre el querer y no poder en su encuentro frente al Balonmano Santoña, uno de los conjuntos más fuertes de este grupo B de la Primera Nacional de Balonmano, que en Nava de la Asunción fue una apisonadora, sobre todo a partir del ecuador de la primera parte, frente a un equipo navero que se vio desbordado y terminó recibiendo un severo correctivo.
No comenzó mal el encuentro el conjunto que dirige Antonio Izquierdo, con las ideas claras en la ofensiva que le permitían mantenerse con el marcador igualado ante un oponente con muchos recursos en su ataque. Incluso en algunos momentos el Mesenor Nava llegó a liderar el marcador con Iván Herguedas y Jorge Oseguera encontrando los espacios y llegando a la mitad del primer tiempo con 7-8 en el electrónico.
DEFENSA Y CONTRAGOLPE
Pero el Santoña elevó su nivel defensivo a partir del minuto quince, Arnau se hizo muy grande bajo los palos, y el equipo de casa comenzó su calvario particular, sumando muchas pérdidas en ataque, castigadas de manera impenitente por un cuadro cántabro que en los segundos quince minutos de primer tiempo se anotó un parcial favorable de 4-15 machacando una y otra vez al contragolpe y sin bajar el nivel defensivo.
El objetivo de mantenerse en todo momento dentro del partido había saltado por los aires, y por ello el filial navero tuvo que plantearse la segunda parte con otros objetivos, tratando de que el correctivo no fuera tan grande como parecía tras el descanso. Así se consiguió que los parciales no fueran tan demoledores, pero a pesar de ello el Santoña también dominó el parcial de la segunda parte, cerrando el duelo con un 24-40 que puso en evidencia las diferencias entre un conjunto ya hecho, y otro que es filial y está en fase de construcción.
