La Policía Nacional de Burgos ha encontrado, sobre las 3 horas de la madrugada de este miércoles el cuerpo sin vida de la mujer de 34 años, Andrea B.E., cuya desaparición se investigaba desde este martes, según fuentes de la Subdelegación del Gobierno.
El marido de Andrea confesó a medianoche ante los investigadores haber quitado la vida a su mujer, y condujo a los agentes hasta el lugar donde se deshizo del cuerpo.
El detenido se encuentra en dependencias policiales de la Comisaría Provincial de Burgos, investigado como presunto autor de un delito de homicidio. No existían en los registros policiales antecedentes de violencia de género entre ambos. El detenido, que carece de antecedentes policiales, será puesto a disposición judicial dentro de los plazos legales previstos.
El marido de Andrea Bejarano, cuyo cuerpo fue hallado sin vida esta madrugada, la mató “en su vivienda” ubicada en la carretera de Poza, en Burgos capital. Posteriormente, se desplazó y ocultó el cadáver ”en una zona frondosa y prácticamente de imposible localización”, en el paraje boscoso cercano a la localidad de Salinillas de Bureba, a unos 40 kilómetros de Burgos, donde fue encontrada. Así lo explicó el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente.
El subdelegado del Gobierno en Burgos indicó que ambos son de nacionalidad colombiana pero “perfectamente situados y arraigados en Burgos”. Andrea Bejarano era técnico de laboratorio en el Hospital Universitario de Burgos (HUBU) y el detenido, de 42 años, trabajaba en el Ejército, en la base militar de Castrillo del Val. Tenían un hijo de siete años.
Indicó que “se está a la espera de los trabajos forenses que tienen que determinar este presunto asesinato, aunque el autor es confeso”. De la Fuente precisó que ambos estaban “conviviendo” y que “esto ha sido con total seguridad una desavenencia conyugal, en trámites de separación, no puedo determinar hasta qué punto la convivencia era todo lo deseable”.
El subdelegado también apuntó que desde el primer momento la investigación se centró en él porque “fue precisamente quien denunció su desaparición” y añadió que “ahí mismo empieza el trabajo de policía que sabe, dentro de esas denuncias, cuáles son los matices que chocan”.
