Los conserjes del IES ‘Marqués de Lozoya’ iniciaban su jornada laboral poco antes de las ocho de la mañana y, al entrar al instituto, descubrieron innumerables desperfectos en todas las áreas del edificio, lo que apuntaba a que se había producido un robo la noche anterior, como finalmente comprobó la Guardia Civil. Este suceso retrasó la entrada de los alumnos para que los agentes pudieran comprobar todos los desperfectos. Al parecer, los ladrones accedieron por una ventana y, al comprobar que otras puertas les cerraban el paso, las reventaron con un extintor.
A falta de registrar todos los objetos sustraídos, los responsables del centro han constatado que el robo ha sido mínimo, no así los destrozos de material. Muchos de los picaportes se arrancaron de las puertas, que además presentaban muestras de haber sido forzadas y golpeadas con violencia. Algunas ventanas de la parte más nueva del instituto estaban hechas añicos y las que aún se mantenían en su lugar tenían grietas a punto de vencer, con el consiguiente riesgo para los alumnos y el personal. Diferentes sustancias del laboratorio se encontraron derramadas en el suelo; lo mismo había sucedido en el bar que se ubica en el interior del centro, donde refrescos y bolsas se mostraban abiertos con todo el contenido por el suelo. Instrumentos de la clase de música aparecieron por los pasillos: una guitarra rota, un teclado en los jardines, etcétera.
Los propios alumnos pudieron fotografiar con sus móviles los innumerables destrozos ocasionados por los desconocidos, y enseguida mostraron su repulsa hacia los hechos, conscientes de lo cuantioso de las reparaciones.
Una ferretería de la localidad también fue víctima de un robo la madrugada del martes al miércoles. Una de las verjas fue forzada y los ladrones destrozaron el escaparate llevándose 14 motosierras allí expuestas. Horas después, un vecino de la localidad descubrió que en su camión faltaban herramientas, las mismas con las que, al parecer, los ladrones forzaron la verja de la ferretería. Fuentes del vecindario han indicado que el hecho no ha sido aislado y ya la semana anterior el mismo establecimiento sufrió otro robo de características muy similares. Entonces fueron cinco las motosierras sustraídas y el consiguiente destrozo de la luna del mismo escaparate.
A pesar de que se desconoce la identidad de los ladrones, todo hace sospechar que se trata de los mismos que cometieron los delitos de la semana pasada, aunque se desconoce su vinculación con el robo en el instituto. El testimonio de algún testigo señala a cuatro hombres encapuchados, pero no se conocen más datos. Otros vecinos manifestaron ayer su intranquilidad ante la reiteración de estos robos en tan poco tiempo de diferencia. Los sucesos se suman, además, a otros ocurridos en otras localidades de la provincia.
