El Hospital Clínico Universitario de Valladolid ha sido denunciado por el fallecimiento de una mujer segoviana de 82 años de edad por “negligencia médica”, según ha explicado a esta Redacción su hijo, Luis Fernando de Diego Valle. En la reclamación presentada ante el Hospital, afirma que su madre fue derivada al mismo el día 2 de febrero, por una infección y falta de riego sanguíneo en los pies. “Fue ingresada a las 12 horas y pasaron 7 hasta que le asignaron una cama. En ese tiempo no le dispensaron medicamentos ni comida, siendo diabética”.
La familia señala que esa noche y el viernes 3 estuvo bien. Durante la tarde recibió diálisis y estaba bien. Al día siguiente su tensión era muy baja (8/5) y le retiraron la medicación contra la hipertensión. “Estuvo todo el día profundamente adormecida y no se mantenía despierta. Las enfermeras intentaban reanimarla y dijeron que podía ser por la diálisis o la morfina; les parecía extraño porque le suministraban la misma cantidad que antes de su ingreso. La visitó un cirujano y repitió los mismos argumentos”, aseguran.
El hijo cuenta que pasó la noche igual y no despertó. “El día 5 intenté darle el desayuno y no lo retenía, lo expulsaba y no respondía. La enfermera me dio los mismos argumentos: la morfina, aunque le extrañaba mucho. Como no podía comer le pusieron suero y reclamé la presencia de un médico, dado que además empezaron a darle espasmos. Toda la mañana pregunté a la enfermera por el médico, los espasmos eran contínuos y cada vez más fuertes. Me dijo: está en quirófano y no puede venir”.
Sobre las 13 horas le trajeron la comida, pero la paciente no respondía. “Muy enfadado, —manifiesta Luis Fernando de Diego— reclamé la presencia del médico y la enfermera, me respondió lo mismo. Inmediatamente después de esto mi madre comenzó a llamar a mi padre, a gritos, en cuatro ocasiones y abrió los ojos, con la mirada perdida. Por esto la enfermera volvió a llamar al médico y la contestación fue la misma. Ante mi impotencia bajé a Atención al Paciente y expliqué la situación. La solución que me dieron era poner una reclamación y presentarla al día siguiente”.
Al volver a la habitación, explicó la situación a la enfermera, que llamó a los nefrólogos, que acudieron enseguida (14,45 horas). “Cuando llegaron y vieron su estado nos dijeron que probablemente le había dado un ictus. Y qué casualidad, en diez minutos aparecieron además una neuróloga y el MIR cirujano vascular. Nos dijeron que su estado era crítico, que le harían un TAC y que era posible que no lo resistiera y que fallecería en poco tiempo”. La enferma fue atendida durante la noche por la nefróloga y la neuróloga; “esta última comunicó a mi hermana que sus compañeros no habían acudido cuando debían y, que tener una tensión anormalmente baja sufriendo hipertensión es un síntoma previo al ictus que debía haber sido estudiado” Finalmente la paciente falleció.
Por todo ello, la familia solicita una explicación sobre todo lo ocurrido, así como un informe médico de su estancia en el Hospital y un informe detallado en el que se dé explicación “de esta negligencia y falta de atención sanitaria”. También piden que se depuren todas las responsabilidades a que haya lugar, tanto por parte del hospital, como por parte del personal sanitario implicado, y una reparación de los daños y perjuicios ocasionados.
La reclamación ha sido presentada también ante el Procurador del Común y el Defensor del Pueblo, y es probable que la familia inicie acciones legales contra el Clínico Universitario.
