Parece que el frío ha llegado y a primera hora de la mañana el termómetro apenas llega a los cinco grados. Aunque estas temperaturas descenderán aún más en los próximos meses son muchos los vecinos de Los Ángeles de San Rafael los que ya lo han sentido en sus huesos mientras esperan al autobús que les lleve hasta sus puestos de trabajo o estudio. Desde hace meses, las marquesinas de la entrada al núcleo que pertenece a El Espinar se encuentran rotas y sin cristales. Los actos vandálicos del pasado verano acabaron con ellos y ahora que son necesario para resguardarse del frío se hacen imprescindibles.
Desde Los Ángeles han solicitado al Ayuntamiento un arreglo inminente que por el momento no ha llegado. “Los que, en algún momento de nuestras vidas, solo teníamos esa marquesina como refugio a primerísima hora de la mañana esperando el bus que nos lleve al trabajo o al centro de estudios, sabemos lo que supone, sobre todo en invierno, qué es estar a la intemperie aguantando el frío de la nieve, el fortísimo viento o la lluvia arreciando sobre nuestros cuerpos”, explica un vecino que, además, señala que “me queda la duda de saber si esa marquesina estuviera en cualquier otra parte de nuestro municipio jamás habrían dejado seis meses sin protección a los usuarios”.
La demanda ha llegado hasta los concejales que viven en el núcleo que ahora deben decidir si arreglan o no los desperfectos causados respondiendo a las quejas y necesidad de los vecinos de Los Ángeles.
