El asesinato el 23 de enero de 1995 de Gregorio Ordóñez hizo que se afiliara al PP, y se presentó a alcalde de su pueblo, Zarauz, cuando mataron el 9 de enero de 1998 a Iruretagoyena, con quien se tomó un trago en un bar el día anterior. Entonces le comentó que tenía que ir la mañana en la que le hicieron explotar en su coche a un curso de autoprotección de la Ertzaintza. Por cierto, se iba de potes con sus compañeros de Batasuna, que no condenaron su asesinato.
Afronta Rafa Olaizola, un soltero vascoparlante y empedernido de 45 años, su cuarta legislatura como concejal del PP en Zarauz, donde mandan EA, Aralar, PNV, PSE-EE y «a la gente le da miedo estar en las listas». El domingo pasado, por la mañana, su escolta vio que su cartel iba adornado con una familiar diana. Tomó fotos y se las envió a la Ertzaintza, algo también familiar.
¿Sospecha de alguien?
Igual es una gamberrada, o han sido los de siempre, y en esta tierra esa diana ya sabemos lo que significa. ETA sigue teniendo pistolas. Los que siempre han hecho ese tipo de pintadas, los que les han dado información, los que homenajean a asesinos y justifican sus acciones, ahora van a votar a Bildu. Y algunos, de manera sigilosa, porque no están contaminados, al no constar nunca en listas de Batasuna, van a engrosar ahora las candidaturas de la coalición. Aquí nos conocemos todos.
¿Le han amenazado antes?
Sí, sobre todo, cuando comencé como concejal, A los pocos meses de asesinar a mi predecesor, Jose Ignacio Iruretagoyena, me pintaron dianas en mi portal, echaron pintura roja en el descansillo, símbolos de rejas, pintadas. Más de una vez se colocaron en manifestación delante de mi casa. Esos mismos ahora van a votar a Bildu y son los que desearían verme desterrado, cuando no enterrado.
¿Ha recibido llamadas últimamente?
No, últimamente no he recibido ninguna llamada.
A su juicio, ¿qué hará la banda con los limpios?
Estarán al acecho y los controlarán. Los usarán de mediadores para presentar sus mociones a favor de los presos, para pedir subvenciones para toda su estructura terrorista-separatista.
¿Qué peso tiene la izquierda abertzale en su pueblo?
Alrededor de un 20 por ciento de los electores.
González Pons invitaba el otro día a los magistrados que votaron a favor de Bildu a que se pusieran, por un momento, en la piel de un concejal vasco.
No es fácil ser concejal en esta tierra. Aquí tenemos 2.000 votantes potenciales -un 12 por ciento-, muchos simpatizantes, pero nadie se atreve a conformar las listas. Los jueces deberían venir un par de días a estar con nosotros, conocer cómo andamos. Deberían saber que ETA, a través de Bildu, tendrá nuestra dirección a través de las listas del censo, controlará nuestros movimientos y horarios en el Ayuntamiento, dispondrá de fuentes de financiación. Es el caballo de Troya. Hay gente de EA que se opone al terrorismo. Y los usarán.
Igual es una Batasuna que pide una última oportunidad.
Bildu está compuesto de dos partidos e independientes, pero con una clara conexión en su mayor parte con Batasuna. Hasta hace dos meses, nuestro alcalde, de EA, y sus concejales se fueron a H1 (Hamaikabat), que se escindió tras muchas tensiones que nacieron con los pactos en Guipúzcoa con ANV. Alternatiba, que nació de EB; cuatro gatos. Como EA tras las últimas autonómicas. Son dos grupos a la deriva que han entrado en el juego abertzale para sobrevivir.
¿Se siente arropado por la dirección nacional?
Totalmente. De todas formas, no debemos caer en el juego de los socialistas, que solo quieren que hablemos del terrorismo, y no de los cinco millones de parados, de la desastrosa situación económica, de sus peleas internas y de sus mentiras.
¿Cree que Oreja tiene razón?
Por supuesto. Jaime siempre ha acertado y ahora una vez más. Cuando dijo que, con este Gobierno, ETA entraría en las instituciones, le dijeron de todo.
¿Qué es lo que Íñigo Urkullu no puede contar?
Urkullu y Zapatero negociaron la legalización de Bildu. La hoja de ruta se ha seguido escrupulosamente. Nos engañan todo el tiempo. En todo esto somos simples fichas. Ellos, desde sus poltronas, fijan las estrategias. El Gobierno que nos causa la ruina y el paro a todos los españoles está sustentado por un partido político como el PNV que incluso, como condición, le exige la legalización de Bidu. Tenemos a Zapatero a cambio de la presencia de esta coalición en las instituciones. Es realmente espantoso.
