Las zonas básicas de salud de Cuéllar, Villacastín y El Espinar son las únicas de la provincia de Segovia que cuenta con una incidencia de más de 2,5 casos de Covid-19 por cada 10.000 habitantes.
La consejera de Sanidad, Verónica Casado, reveló que el Gobierno autonómico vigila las zonas de salud que cuentan con índices superiores al marcado para evitar que la situación no se descontrole y necesite de “medidas más rigurosas”, que incluyen incluso el reinicio de los confinamientos como ha sido el caso de Íscar y Pedrajas de San Esteban.
Preguntada por la situación de la localidad de Coca, perteneciente a la zona básica de salud de Nava de la Asunción, la consejera de Sanidad reveló que en estos momentos no se han detectado síntomas de contagio comunitario y que además su zona básica no se encuentra en amarillo (más de 2,5 contagios por 10.000 habitantes), por lo que no se contemplan medidas adicionales.
Casado reveló que en estos momentos dentro de la Comunidad existen tres áreas rojas (donde se pide que se restrinja al máximo el contacto social) en la zona de salud de Íscar y las dos de Aranda de Duero. Aparte, existen 32 zonas básicas de salud en situación amarilla.
Estas son Cebreros, en la provincia de Ávila; en Burgos: Aranda Rural, Burgos Rural Norte, Burgos Rural Sur, Gamonal, Miranda de Ebro Este, Villarcayo y San Agustín; Matallana de Torío, en León; Baltanás, Carrión y Palencia Rural, en la provincia palentina; y Bejar, Pedrosillo el Ralo, Garrido Norte y Villalobos, en Salamanca.
En Segovia, Cuéllar, Villacastín y El Espinar; en Soria, Gómara, Soria Norte, Soria Sur y Soria Rural; en Valladolid; Tordesillas, Tudela de Duero, Valladolid Rural y Cigales, y en Zamora, Benavente Norte, Mombuey, Santa Elena y La Guareña.
Casado pidió a los ciudadanos que eviten las aglomeraciones y los desplazamientos.
