La provincia de Segovia contará este curso con cuatro centros educativos dentro del programa ‘Bibliotecas Escolares de Futuro. Bibliotecas 2030’, una iniciativa impulsada por la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León, que dirige Rocío Lucas, con el objetivo de convertir las bibliotecas escolares en espacios vivos de creatividad, innovación y pensamiento crítico.
El proyecto busca que las bibliotecas dejen de ser únicamente lugares de lectura o préstamo de libros para transformarse en entornos de aprendizaje activo, experimentación y trabajo colaborativo, donde el alumnado pueda desarrollar competencias digitales, comunicativas y sociales. En palabras del departamento que encabeza Rocío Lucas, estas bibliotecas pretenden ser “espacios donde el alumnado pueda desarrollar su creatividad e innovación y así también contribuir al fomento de un pensamiento crítico a través de nuevas formas de lectura”.
Los centros seleccionados son el CRA ‘Campos Castellanos’ de Cantimpalos, el CEIP ‘San Gil’ de Cuéllar, el CRA ‘El Carracillo’ de Sanchonuño y el CEIP ‘La Pradera’ de Valsaín. Cada uno de ellos recibirá una ayuda económica de entre 2.000 y 3.000 euros, según el número de alumnos matriculados, para desarrollar su proyecto.
Estos colegios se comprometen a reconfigurar sus bibliotecas como espacios de innovación y trabajo interdisciplinar, incorporando actividades como radio escolar, cineclubes o talleres creativos, además de impulsar la igualdad de género y la inclusión. También se promoverán proyectos de escritura, lectura compartida, producción de contenidos y competencias mediáticas, así como la aplicación de tecnologías digitales que faciliten el aprendizaje autónomo y el pensamiento crítico.
La convocatoria, publicada en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl), ha seleccionado 67 proyectos en toda la comunidad, 47 en zonas rurales y 20 en urbanas, con un presupuesto total de 159.000 euros.
