Guardo, Santiago, Mieres y Arroyo. Cuatro salidas: cuatro derrotas. Cero puntos de 12 posibles es el pobre balance a domicilio del Segosala Segobus, que se volvió de vacío de su visita al segundo clasificado, que decidió el choque gracias a su contundencia para aprovechar los fallos rivales.
Empezó bien el equipo de Ángel Zamora, dominando el ritmo y siendo capaz de generar oportunidades para adelantarse en el marcador. En defensa el equipo mantenía la concentración y el Arroyo no estaba cómodo. Pero los visitantes no fueron capaces de traducir su dominio en ventaja. Se lo hizo pagar el conjunto pucelano, que aprovechó una pérdida de balón del Segosala tras un saque de banda para poner el 1-0 en el marcador tras un dos contra el portero
Pese al mazazo, los visitantes no se vinieron abajo y siguieron confiando en su juego. Dominaban con profundidad y generaban oportunidades de peligro. Así, Pedro Bayón prolongó su buen momento de cara a puerta con el tanto del empate cuando no se había llegado al ecuador de la primera parte. Dos minutos después, el Segosala completaba su remontada al rematar Óscar en el segundo palo una buena jugada por banda izquierda.
El 1-2 no calmó la ambición del Segosala, que siguió llegando con peligro frente a un rival que pronto se puso con cinco faltas. Sin embargo, en el minuto 14 el Arroyo logró empatar gracias a una jugada de estrategia. Un duro golpe anímico para los segovianos, que encajaron en una acción defensiva que habían trabajado durante la semana.
Tras el 2-2, el Unión Arroyo quiso aprovechar el mal momento de los visitantes y a punto estuvo de marcharse por delante al descanso. Por su parte, el Segosala enfiló los vestuarios con la sensación de que su buen juego no había tenido premio tras un disparo de diez metros que Edu lanzó al larguero.
En la segunda parte, el Arroyo pasó a dominar el choque. El Segosala tenía que sufrir, con más dificultades para acercarse a la portería rival. Adri salvaba con grandes intervenciones a los segovianos, que encajaron el 3-2 a los tres minutos.
Las imprecisiones de los visitantes fueron más frecuentes y parecía más cerca el cuarto gol de los locales que el del empate de los segovianos. Y así ocurrió a cinco minutos para el final, cuando el Segosala ya tenía preparado el portero-jugador en banda.
Con el cinco para cuatro, el equipo de Ángel Zamora asedió la portería del Unión Arroyo, logrando recortar distancias con un tanto de Pedro Bayón a poco más de dos minutos para el final. Buscó el Segosala el tanto del empate, pero el Arroyo supo aguantar su ventaja y dejar a los segovianos sin puntos.
