¿Cuánto puede llegar a cobrar un torero? Y, ¿un novillero? Son preguntas muy frecuentes en círculos de ambiente de bar en el que se reúnen gente taurina con personas que sin entender de este mundo se interesan por su devenir, al ver que es un espectáculo que mueve importantes cifras de público, pero que lleva consigo una serie de costes nada baratos. Unos gastos que se ven insuflados por los permisos y seguros y el desequilibrio de la tabla salarial en la que un banderillero -sin quitarle méritos-, por poner dos pares a un astado, cobra más que un novillero con picadores, por estar más tiempo delante de la cara de dos utreros. Según los mínimos que recoge el Boletín Oficial del Estado (BOE) y atendiendo a un contrato del Grupo C en una plaza de cuarta categoría, que son las cantidades más bajas que se manejan de manera legal, el primero se lleva 638 euros frente a los 483 que -en teoría- le quedan al novillero que está empezando. Unos números que comprometen la estabilidad del sector, pues el mozo de espadas gana prácticamente lo mismo que el novillero: 437 euros. Un baremo que se hace extensible también al problema de los derechos de imagen que acusa la plataforma de emisiones online One Toro.
La tabla salarial para el año 2024 se negoció en el VI Convenio colectivo nacional taurino, de resolución de fecha de 16 de enero de 2024, de la Dirección General de Trabajo, en el que intervinieron por una parte la Asociación Nacional de empresas organizadoras de espectáculos taurinos (ANOET), en representación de las empresas del sector, y de otra por las organizaciones sindicales FESMC-UGT, CC.OO.–Servicios a la Ciudadanía, Unión de Toreros (UT), Unión Nacional de Picadores y Banderilleros Españoles (UNPBE) y Asociación Nacional de Mozos de Espadas (ASNAME).
Según este convenio, publicado en el BOE el 27 de enero de 2024, un matador de toros en una plaza de cuarta categoría -una portátil no fija- por la lidia de dos ejemplares tiene unos mínimos totales de 10.679 euros, distribuidos en 5.294 de costes de la cuadrilla, 3.713 de gastos generales y 1.672 de honorarios -lo que le queda-. Por tanto, para una corrida de tres toreros, la inversión mínima de un empresario es de 32.037 euros solo en la contratación de los diestros y sus cuadrillas; toros aparte, cuyo precio ronda los 5.000 euros por animal. En el caso de llevar a un torero del Grupo A, que son aquellos que superan las 36 corridas el año anterior y en el que se suelen incluir las figuras, el precio asciende a 17.688 euros como mínimo, de los que el espada tiene unos honorarios de 2.683 euros. En este grupo, y con vistas a la próxima temporada, ya se incluyen Andrés Roca Rey -líder del escalafón con 70 festejos-, Alejandro Talavante, Sebastián Castella, Daniel Luque, Juan Ortega, José María Manzanares, Borja Jiménez y Emilio de Justo, y en el que puede entrar Miguel Ángel Perera en lo que queda de campaña.
En en el caso de una plaza de primera (Madrid, Sevilla, Córdoba, Barcelona, Valencia, Zaragoza, Bilbao, San Sebastián, Pamplona y Málaga) -espacios con mayor capacidad de localidades-, las cifras se multiplican. Un torero de los modestos, del Grupo C, pasa a cobrar unos mínimos de 15.762 euros, que se reparten en 7.764 para la cuadrilla, 3.978 de gastos generales y 4.020 de honorarios. Al incluir un torero del Grupo A, los mínimos se van a 22.983 euros, que se dividen en 9.906 para la cuadrilla, 6.799 de gastos y 6.278 de honorarios. Esta cifra es la que viene recogida en el convenio colectivo, pero en una plaza de primera categoría una figura suele pedir más de lo estipulado por los mínimos. Hace dos años se hablaba, por ejemplo, de que un torero como Talavante cobraba 240.000 euros por corrida en Madrid.
En un mano a mano, es decir, en una corrida de dos toreros que cada uno de ellos lidia tres astados, los mínimos oscilan entre los 14.248 euros que puede cobrar un integrante del Grupo C en una plaza de cuarta categoría a los 31.585 de un diestro del Grupo A en un coso de primera. En una encerrona, un único espada al frente de seis toros, los mínimos van desde los 32.709 a los 65.024.
PLAZAS DE SEGUNDA
Dentro de las plazas de segunda categoría se encuentran todas las capitales de provincia que no hayan sido clasificadas de primera, entre las que se encuentra el bicentenario coso de Segovia; más las de Vistalegre (Madrid), Colmenar Viejo (Madrid), Aranjuez (Madrid), Gijón, Algeciras (Cádiz), Jerez de la Frontera (Cádiz), El Puerto de Santa María (Cádiz), Linares (Jaén), Plasencia (Cáceres), Mérida (Badajoz), Cartagena (Murcia) y Olivenza (Badajoz). En estos ruedos los mínimos de un torero del Grupo C que actúe con dos ejemplares son 14.271 euros, de los que 3.333 son honorarios para el propio espada, 7.066 van para el resto del equipo y 3.872 se atribuyen a conceptos de gastos. Los mínimos de un diestro del Grupo B son de 15.731, con 4.793 de honorarios, y los de uno del A se sitúan en 21.282, con 5.103.

REJONES
El baremo de los rejoneadores estriba en función del grupo al que pertenecen y en función del coso, pero no diferencia la lidia entre novillos y toros, al ser una práctica habitual que un jinete o amazona de alternativa se anuncie con utreros e incluso erales en algunos sitios. Según la publicación que recoge el convenio colectivo, agrupa a los astados con el término ‘res’ como “animales de 3 años o menos de edad”. Es por ello, que rejoneadores como Pablo Hermoso de Mendoza o Diego Ventura actúan solo con toros -4 años de edad-, haciendo valer sus honorarios con mayor caché.
Según la tabla salarial, los mínimos de un rejoneador del Grupo C en novillada de dos reses son de 5.822 euros en plaza de cuarta categoría, 6.766 de tercera, 8.450 de segunda y 9.789 de primera. En el caso de que el rejoneador pertenezca al Grupo A, los mínimos son de 7.892 euros en plaza de cuarta categoría, 9.733 de tercera, 11.143 de segunda y 12.215 de primera.
NOVILLADAS
¿Cuánto cobra un novillero con picadores? Los mínimos son 5.072 euros, a repartir 3.733 entre la cuadrilla y 853 de gastos generales. Lo que le quedan al novillero después de lidiar dos utreros son 486. Honorarios por cada ejemplar: 243. Tres euros más gana en un coso de tercera (483).
Dentro de este apartado también hay tres grupos, pero es muy complicado salir del C dado que esta etapa en teoría suele ser un periplo de dos o tres años -aunque cada vez se prolonga más- para dar el salto al escalafón de matadores de toros. Si ya cuesta sumar 25 novilladas a lo largo del periodo de novillero con picadores -las necesarias para poder tomar la alternativa-, subir de grupo en una temporada resulta realmente difícil. Con todo ello, los mínimos de torear en una plaza de primera son 7.399 euros; distribuidos en 5.200 para la cuadrilla, 1.087 de gastos y 1.112 de honorarios. En un escenario de segunda, los mínimos son 6.476 euros, de los cuales los miembros que acompañan al novillero tienen una contratación de 4.655 y él se lleva 866.
NOVILLADAS SIN PICAR
En cuanto a los novilleros sin picadores, los mínimos por lidiar dos astados en una portátil son de 2.302 euros, con unos gastos de cuadrilla de 1.519, generales de 537 y unos honorarios de 246. En una plaza de primera los mínimos se van hasta los 3.257 euros, siendo 270 los honorarios que al menos debería percibir el novillero. En el caso de lidiar un solo animal, el baremo va entre 1.781 y 2.438, dependiendo de la plaza.

FESTIVALES
En el apartado de festivales se diferencian en si se emplean picadores o no, dentro de un festejo en el que es más habitual la lidia de una res que dos. En una plaza portátil, por ejemplo, los mínimos de un matador de toros por un novillo picado son 4.596 euros, mientras que en un escenario de primera ascienden a 8.197. Para un festival sin picar el baremo está en 2.780 y 5.768.
Los festivales suelen tener también la presencia de un rejoneador que abra la tarde, una contratación que va desde los 3.728 euros a los 6.226 por una res en los que se anuncian como ‘picados’ y desde los 2.414 a los 5.026 sin picar, dependiendo la categoría de la plaza. Por su parte, un novillero con picadores, con su cuadrilla, se lleva entre 4.416 y 6.825 si es con caballos y entre 2.148 y 3.965 si es sin picar.

SOBRESALIENTES
Por otro lado, la figura del sobresaliente, que solo actúa en caso de que los matadores anunciantes resulten heridos pero que cobran lo mismo en el momento de hacer el paseíllo, tiene unos mínimos de 1.528 euros en las corridas mano a mano, que pueden irse a los 2.719 si es en una plaza de primera categoría. Además, si se anuncian en una encerrona, donde solo hay un torero titular y las opciones de torear son mayores, el rango se amplía a 2.167 en una plaza de pueblo a los 4.354 en un emplazamiento de primera.
LOS DEL TÚNEL
Todos estos datos se ciñen al convenio colectivos nacional taurino, publicado a principios de 2024; pero, como ya se ha dicho antes, las figuras, que ya tienen un reconocimiento ganado y conocen cuál es el impacto económico que generan en taquilla, suelen reclamar más dinero que el que estipulan los mínimos. A su vez, están los diestros o rejoneadores que están en el lado opuesto, que no encuentran contratos, y, con tal de torear, prefieren ir por debajo de lo que viene reflejado en el convenio. Esto es lo que coloquialmente se llama “ir por el túnel”, una práctica que suele darse entre toreros modestos, que no está bien vista dentro del sector, pero que existe; al igual que hay novilleros -o sus representantes- que ‘pagan’ el animal para sumar festejos o simplemente van por el boletín.
