El Mercado de la Cruz y la Media Luna, instalado ayer en la plaza principal de San Cristóbal de Segovia, atrajo a numerosas personas que se animaron a visitar los más de 30 expositores con productos artesanales de alimentación, ropa, complementos y elementos de decoración que conformaron el recorrido comercial y cultural. Además, los vecinos colaboraron directamente en la ambientación del “mercado campesino” aportando utensilios de labranza y elementos de mobiliario antiguo, así como portando vestimenta propia de las fiestas de moros y cristianos. La alcaldesa de San Cristóbal de Segovia, Belén Salamanca, ha explicado que el nombre del mercado reúne los símbolos de identidad de un pueblo en el que en el pasado han convivido dos culturas y actualmente también es un núcleo de fusión. “Hemos querido destacar nuestra historia y también la buena acogida que los vecinos originales del pueblo han dado a los que han venido desde diferentes lugares a vivir aquí, pero a la vez hemos querido dar un mensaje de respeto medioambiental, mirando al campo y a la cacera del Cambrones, y crear un ambiente de fiesta”, ha señalado la alcaldesa que ha mostrado su intención de mantener esta iniciativa en próximos años.
El programa de fiestas en honor a San Antonio de Padua elaborado por la comisión de festejos y el Ayuntamiento da protagonismo a las actividades culturales y diurnas, pensando en las personas mayores, padres y niños.
Hoy, día grande de las fiestas, a las doce de la mañana se celebrará una misa, amenizada por el coro de la parroquia. A la salida, los grupos de danzas de la localidad acompañarán la imagen de San Antonio que será sacada en procesión por el pueblo. A las tres de la tarde los vecinos degustarán una paella en el parque Pradovalle, donde después se celebrará el Consejo de Infancia y se disputarán juegos autóctonos
A partir de las ocho de la noche, en el centro cultural se ofrecerán representaciones teatrales.