El fotoperiodista Ricardo García Vilanova, que sufrió un secuestro de seis meses y medio en Siria, aseguró ayer que en su trabajo trata las imágenes de los heridos y víctimas de los conflictos como le gustaría «que hicieran con él o algún miembro de su familia» Secuestrado junto con el periodista de El Mundo Javier Espinosa, lamentó las dificultades por las que atraviesan los «freelance» en medios españoles, donde no hay posibilidad de subsistir, y ha dicho que «o te buscas la vida fuera o cambias de profesión».
Durante las VII Jornadas de Periodismo, organizadas por la Asociación de la Prensa de Segovia y el campus «María Zambrano» de la Universidad de Valladolid, el reportero que colabora con medios como CNN Internacional, Wall Street Journal o New York Times, presentó sus trabajos fotográficos y vídeos realizados en Siria, según información recogida por agencias.
Sin contar los más de seis meses de secuestro, lo que ha definido como «accidente laboral», García Vilanova ha estado en Siria trece meses, en varias visitas a lo largo de los últimos tres años, viviendo situaciones muy dramáticas de sufrimiento de civiles, a juzgar por sus trabajos.
Así, dio a conocer algunas cifras que ponen de relieve la dureza del conflicto, que ha causado ya más de 200.000 muertos, 3,5 millones de refugiados y seis millones de desplazamientos internos, y calificó de «lamentable» el apagón informativo en torno a esta guerra, a su juicio, «porque ha dejado de interesar a los medios y también por la seguridad».
En la presentación, el también fotoperiodista Gervasio Sánchez, que ha intervenido después tras el visionado del reciente programa «Impresincidbles», de TVE, ha dicho que García Vilanova forma parte de una importante generación de unos 15 fotógrafos españoles, pero que todos se han visto obligados a trabajan fuera.
Sánchez ha explicado que tuvo el orgullo de representar a las familias de García Vilanova y Espinosa, durante el secuestro, y ha afirmado que, tanto estos dos como el también secuestrado y liberado, Marc Marginedas, «han tenido un comportamiento ejemplar».
Según Sánchez, hay un acuerdo tácito entre los tres de no hablar del secuestro para no poner en peligro a vida de otros periodistas extranjeros que aún continúan capturados, disciplina que no han seguido periodistas franceses también liberados, lo que ha considerado como «vergonzoso».
La situación de la televisión pública estatal y las autonómicas ha sido abordado por periodistas y profesores, como Agustín García Matilla —que pronunció la conferencia inaugural de las jornadas— Alicia Gómez Montano, Rafael Díaz Arias, Manuel Aguilar, Begoña Sánchez, Isabel Fernández, Teresa Sanz, Mariola Cubells, Eduardo Álvarez y Javier Mayoral. Dos ideas han prevalecido: el hecho de que haya legislación suficiente como para que pueda desaparecer de la noche a la mañana la televisión pública en España y que las autonómicas nunca han vivido un momento tan bajo de calidad, manteniéndose casi de forma artificial.