La selección de Brasil ganó este viernes a Costa Rica (2-0) en el Estadio de San Petersburgo, en la segunda jornada del Grupo E del Mundial, gracias a dos agónicos goles de Philippe Coutinho y Neymar en el descuento que acabaron con el muro que había sido un gran Keylor Navas, que no pudo hacer nada para evitar la eliminación de los ‘ticos’.
No pudo superar una ofensiva Brasil a Navas y su defensa en los 90 minutos reglamentarios pero, en un descuento que se alargó hasta los 8 minutos de más, logró por dos veces perforar la red rival gracias a Philippe Coutinho, primero, y a Neymar después cuando Costa Rica ya estaba hundida moral y físicamente.
Pese a tener alguna ocasión buena, como el disparo cruzado de Celso Borges en el minuto 13 que de haber entrado hubiera cambiado el guión del partido por completo, Costa Rica se vio obligada a defenderse y tuvo suerte de no verse fuera del torneo antes gracias al gran partido del guardameta madridista, que salvó a los suyos en incontables ocasiones.
La insistencia de la ‘canarinha’, de azul esta vez, y el gran número de efectivos ofensivos con los que Tite afrontó casi toda la segunda parte, acabaron por dar sus frutos. El gran artífice del triunfo, como lo fue del empate inicial ante Suiza, fue el blaugrana Coutinho, que de puntera y apareciendo en una loca jugada dentro del área con dejada de cabeza de Firmino y mal control de Gabriel Jesus tumbó al muro Navas.
Ahí explotó de alegría Brasil, y se derrumbó Costa Rica. Además, en un descuento larguísimo principalmente por un VAR que hizo historia al anular un injusto penalti a Neymar y pitado inicialmente por el holandés Kuipers, llegó la ‘puntilla’ del ‘10’, que acabó llorando de emoción tras un partido en el que tampoco sobresalió en exceso.
Ruptura del empate
Estos dos goles deshicieron un empate que no le servía de mucho a Brasil, que seguía dependiendo de su resultado ante Serbia en la última jornada para poder pasar y donde Tite, tras una primera parte donde su equipo dominó pero con poco impacto ofensivo, optó por hacer un cambio de cromos entre Willian y Douglas Costa al descanso y, después, darlo todo retirando a Paulinho y situando en punta junto a Gabriel Jesus a Roberto Firmino.
Un cambio de sistema que no hizo más que acentuar el acoso de Brasil a Costa Rica, que salvaba los muebles gracias a un inconmensurable Keylor Navas. El portero ‘tico’ sacó de quicio seguro a sus compañeros en el Real Madrid Marcelo, que tuvo buenas ocasiones en disparos lejanos, o Casemiro, al que detuvo otras dos buenas ocasiones, pero también al resto de brasileños. Y si no, su larguero estaba aliado con él para frenar a Gabriel Jeuss.
Finalmente, con una Costa Rica incapaz de acercarse con peligro a la portería de Alisson, que apenas tuvo que intervenir a un cabezazo de Celso Borges en la segunda parte, el frontón en que se convirtió el partido dio un triunfo esperanzador a Brasil, que se pone con 4 puntos en el grupo y que se jugará el pase y el liderato frente a Serbia en la tercera y última jornada.
