«Son calumnias y mentiras». Así de tajante se mostró ayer la presidenta de Castilla-La Mancha y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, para descalificar la declaración realizada horas antes por el extesorero popular Luis Bárcenas en la Audiencia Nacional. Tan convencida se mostró de la falsedad de las acusaciones del imputado que llegó a solicitar al magistrado Pablo Ruz, instructor del caso, que le permita desmentir las palabras de su antiguo compañero en sede judicial.
«Tengo que esperar a lo que haga el juez, que es quien debe tomar la decisión, pero hoy me gustaría que se produjera (la citación como testigo) porque me daría pie a desmentir estas calumnias en la Audiencia», subrayó la número dos de la formación popular, quien, a la pregunta directa de si recibió los sobres en su despacho con dinero negro en 2009 y 2010, como defendió el que fuera gerente de las finanzas de Génova, afirmó con contundencia: «nunca».
La líder conservadora añadió que el exsenador por Cantabria solo trata de «salir indemne» de un caso en el que está directamente implicado. Por eso, remarcó que ella no va a admitir que un «presunto delincuente infame o injurie al partido o a sus dirigentes para salir ileso». En la misma línea, insistió en que no va permitir el chantaje de nadie «por muy desesperado» que esté después de haber ingresado en prisión.
Cospedal recordó que el punto de partida de estas acusaciones es que Bárcenas se encuentra en la cárcel por la trama Gürtel y sin poder justificar su patrimonio de 48 millones de euros en Suiza. En este sentido, cuestionó la documentación entregada por el que fuera responsable financiero de Génova 13 al magistrado de la Audiencia sobre una hipotética contabilidad B del PP, indicando que su autor debe saber a qué responde y sino es solo la justificación del patrimonio acumulado en las cuentas. «La únicas cuentas del partido son las oficiales, auditadas por el Tribunal Constitucional», aseguró la secretaria general del PP.
Por otro lado, negó que tanto ella como otros dirigentes del partido hayan cobrado sobresueldos opacos. «Todos nuestros ingresos están justificados debidamente», afirmó. «La declaración del presidente es pública y conocida; la mía también; y el resto, me vuelvo a remitir a que ellos las tienen presentadas en la Cámaras y que cuando se llegue a un acuerdo sobre qué tipo de declaración van a hacer pública todos los partidos, y en concreto el PSOE, las presentaremos», apuntó.
También aseguró que es «taxativamente falso» que hayan presionado de manera directa o indirecta a Bárcenas. Además, admitió «que hay mucho malestar entre las bases» del partido, pero no hacia sus dirigentes, sino solo hacia el imputado «porque es una persona que está difamando al PP».
