La semana pasada nos llegó una buena noticia de contenido cultural: El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León había probado la declaración del Teatro Juan Bravo, de nuestra ciudad, como Bien de Interés Cultural (BIC) con la categoría de “monumento”. El oportuno expediente se había incoado en 1983…pero ha pasado un tiempo que al fin ha resultado productivo. El Teatro Juan Bravo es BIC, y ello nos hace recordar al fatal y desgraciadamente destruido Teatro Cervantes, que con toda seguridad habría podido contar también con la misma declaración, porque si la construcción del ahora distinguido se llevó a efecto entre 1915 y 1917, el Cervantes se inauguró en 1925, y ambos tenían una estructura y distribución interior muy semejantes.
También, dentro del ámbito cultural, se registró la aprobación por el pleno municipal, y por unanimidad, de nombrar hijo predilecto de la ciudad al notable vitralista y artista segoviano Carlos Muñoz de Pablos. Si el acuerdo ha sido acertadísimo en todos los aspectos, a la vista de la impresionante tarea artística desarrollada por Carlos, a mi parecer llega “un poco tarde”, porque sin desmerecer a los anteriormente nombrados con el mismo título, desde 1960 en que Muñoz de Pablos, a sus 22 años, ya recibió el Primer Premio de Maracaibo (Venezuela) para la construcción de vidrieras con destino a la Basílica de los Padres Paúles, y en el mismo año, el Primer Premio Nacional de la Galería “Templo y Altar” para la construcción de vidrieras. De entonces acá, su trabajo como creador e investigador en materiales para vidrieras (que ha contagiado a sus hijos) ha sido sobresaliente y su nombre ha rebasado con creces el reconocimiento a su arte fuera de España. Como es sabido, su última por ahora obra de gran magnitud, (a través de Vetraria, empresa familiar) es la construcción de vidrieras y restauración de las muchas deterioradas en nuestra Catedral.
Por cierto que hay algo que no sé si será normal en otras corporaciones en cuanto se refiere al registro de concesiones, honores y distinciones, y es hacer “precisamente distinciones” entre los galardones concedidos antes y después de la constitución de los ayuntamientos democráticos. Me parece que la validez de los anteriores y los de después, será idéntica. Digo yo ¿no? Lo mejor es olvidar la política en estos casos y no volver a hacer distinciones. Las concesiones, anteriores y posteriores, están refrendadas por los acuerdos municipales. Y es lo que vale.
Ahora nos vamos por otros caminos, estos industriales; he aquí también retraso en obra que se dice va a ser tan importante para la capital como el complejo industrial de Prado del Hoyo. Y digo retraso (no dudo que habrá problemas), pero es que un proyecto similar en el polígono Los Hitales, de propiedad municipal, en Bernuy de Porreros parece que se le va adelantado en “la carrera”.
Pero no importa, porque aquí seguimos “inyectando” dinero para el CIDE. Ahora, otros 82.000 euros para carpintería y 137.999,70 para el suministro e instalación de mobiliario, equipamiento y “señalética” para las zonas comunes y compartidas. (Y en total van…No sé si alguien del Ayuntamiento lo sabrá y llevará bien las cuentas del “monstruo”). Veremos cuántas “inyecciones” más habrá que seguir aplicando para rellenar el edificio…En espera, claro, de que algún día se vea “relleno” de algo útil para la ciudad.
Supongo que, paralelamente a estas “acciones”, también se tomarán en cuenta, para el oportuno estudio y diálogo, las últimas propuesta de la oposición. Porque no vale “dejarlas sobre la mesa” porque no han salido del equipo de gobierno. ¿No dicen que hay que “colaborar” todos? Pues, eso, vamos a colaborar TODOS y dejar el “sí es sí” y el “no es no” para los que nada tiene que hacer o pensar en algo positivo. Porque ya escribía el filósofo alemán Schopenhauer, en 1850, en su “Parerga und Paraliponema”: “Cada treinta años aparece una nueva generación de boquirrubios, ignorantes de todo, que quieren devorar, sumaria y precipitadamente, los resultados del saber humano acumulado a través de los siglos y que enseguida se creen más hábiles que todo el pasado”.
