El español Alberto Contador reconoció que saber que puede disputar el Tour de Francia esta temporada, después de que su equipo consiguiera la licencia que otorga la UCI para correr las grandes vueltas, le da «tranquilidad» para preparar la temporada. «Te organizas pensando que vas a ir, pero te arriesgas a que, si no vas, desaprovechas otras oportunidades. Además, la licencia te da la seguridad de cara a los patrocinadores».
El de Pinto reconoció que si no obtenía la licencia no podía garantizar su presencia en la ronda gala. «Cuando dije eso, hablaba a nivel deportivo. Estoy haciendo la base porque tenemos que hacer una programación perfecta para ir a por la victoria. Por eso dije que si no tenía garantizada la presencia me iba a plantear si ir o no», alegó.
El Tour es el principal objetivo del madrileño para 2013. «Aún no puedo decir que lo vaya a correr a ciencia cierta, pero sí está en el horizonte. En cuanto al resto de las pruebas del curso, no dependerá de lo que haga allí, sino de cómo vaya la temporada».
Contador es el vigente campeón de la Vuelta a España, pero apuntó que no sabe si estará en la salida. «Fue espectacular. He disfrutado como nunca en la carrera, el público se volcó con nosotros y fue estupendo. Habrá que ver si este año estoy», precisó.
En cuanto a sus rivales para la próxima campaña, tiene a todos en cuenta. «Si tuviera que decir un corredor en este momento sería Chris Froome, por cómo ha evolucionado y por el potencial que tiene tanto en las subidas como en la contrarreloj. Andy Schleck tiene una clase impresionante y la gente ya se ha olvidado de él, pero si se prepara tres meses para el Tour lo disputará», argumentó.
Dopaje
El madrileño también habló de los malos momentos que pasó cuando fue sancionado por dopaje. «Es algo que voy a recordar siempre y no me viene mal hacerlo. Estoy centrado en el presente y el futuro y eso ha quedado atrás, pero olvidado no está».
Tras una dura lucha en los tribunales, la UCI le ganó la partida. «Me resultaba imposible no recurrirlo. A nivel económico ha sido una inversión alta pero lo volvería a hacer ahora», reveló.
«Es imposible que el ciclismo esté más controlado y no me cabe en la cabeza que haya deportistas que corran haciendo cualquier cosa. Lo de Lance Armstrong es un tema que pasó hace una década y ha salido todo ahora a la luz. Está claro que la cosa puede cambiar de la noche a la mañana», finalizó.
