Durante el encuentro que jugaron el pasado jueves la Gimnástica Segoviana y el Atlético de Madrid en el campo de La Albuera, los aficionados tuvieron la oportunidad de ver la nueva imagen que presentaban los fondos del municipal, ya sin gradas, y pintada la pared de color verde. El suelo de los fondos estaba sin asfaltar, un hecho que en los encuentros de Liga que juegue la Segoviana supondrá un problema al haber en el suelo elementos susceptibles de ser arrojados al campo.
La construcción de las gradas en los fondos del campo resulta escasamente viable a estas alturas, porque la realización de los trabajos supondría un desembolso de alrededor de 600.000 euros, una cantidad de la que el Ayuntamiento de Segovia no dispone. Hay formas de conseguir esa cantidad de dinero, como apostando de nuevo por recibir una cantidad del uno por ciento de la recaudación de las quinielas, o bien recibiendo alguna ayuda de la Junta de Castilla y León.
No se puede olvidar que la institución regional puso mucho de su parte, entiéndase esta expresión en clave económica, para que, no sólo uno, sino varios conjuntos castellano-leoneses que militaban, y militan actualmente, en la Segunda División B, pudieran no sólo remodelar sus estadios, sino incluso construir unos nuevos, como sucedió con el Zamora y su nuevo estadio Ruta de la Plata, la Ponferradina con El Toralín, o el Palencia con la Nueva Balastera.
Pero para que la Junta de Castilla y León colabore en la construcción del campo de fútbol, lo primero que han de cambiar son las relaciones que la institución regional mantiene con el Ayuntamiento de Segovia, y que han llevado a la ciudad a no percibir un solo euro en materia de instalaciones deportivas durante la última legislatura. La llegada a la Consejería de Cultura de Alicia García Rodrigo, y a la Dirección General de Deportes de Alfonso Lahuerta, podría mejorar las deterioradas relaciones entre Ayuntamiento y Junta de Castilla y León.
Eso sí, en el caso de que finalmente el Ayuntamiento pudiera recibir esa cantidad de dinero para construir las gradas, en el mejor de los casos éstas no estaría finalizadas hasta bien entrado el año 2012, ya que habría que aprobar la obra en pleno municipal, posteriormente publicitar la obra para que las empresas pudieran optar al concurso, recibir las plicas, elegir la más idónea y esperar los plazos de alegaciones antes de licitar la obra. Un plazo administrativo al que habría que sumar el propio de la construcción de las gradas.
La tercera vía
Además de la construcción de la grada, o de la no edificación de la misma por falta de dinero, existe una tercera opción para los fondos de La Albuera, que pasa por la instalación de gradas supletorias, bien alquilándolas a una empresa, bien adquiriéndolas con el fin de que posteriormente puedan ser situadas en otra instalación deportiva,
El precio del alquiler de las gradas supletorias rondaría los 100.000 euros por una temporada, aunque existe la posibilidad de instalar las gradas por partidos, o incluso por meses, y evidentemente los plazos de instalación serían mucho menores, ya que esta obra podría sacarse por el procedimiento de “concurso cerrado”, eligiendo la mejor oferta de las presentadas por tres empresas a las que se las informa de la posibilidad de pujar por la obra.
Sea como fuere, el campo de La Albuera tiene unos fondos sin gradas, y como bien dijo el presidente de la Segoviana, Fernando Correa, en la entrevista digital concedida a El Adelantado: “ojalá vaya tanta gente al campo que haga necesaria la construcción de las gradas”.
