Un centenar de expertos, amantes y defensores del patrimonio cultural, procedentes de 28 países europeos, visitaron ayer el Real Sitio de San Ildefonso-La Granja invitados por Hispania Nostra, institución creada en 1976 y que actualmente aglutina a más de 200 asociaciones españolas de patrimonio. Los asistentes, que visitaron el Palacio Real de La Granja y sus jardines y la Real Fábrica de Cristales, para después almorzar en Segovia capital, formaban parte de las 600 personas que han participado esta última semana en Madrid en diferentes foros y actividades relacionadas con el patrimonio, como la Asamblea Anual de Europa Nostra y el Congreso Europeo de Patrimonio Cultural. Madrid ha sido la capital anfitriona al conmemorarse el 40 aniversario de Hispania Nostra, una de las asociaciones más veteranas de Europa Nostra.
A este respecto, los actos arrancaron, este lunes, con la inauguración de la exposición ‘Re-conociendo el Patrimonio Español en Europa”, por parte de la Reina doña Letizia, en la que Hispania Nostra muestra los 191 premios otorgados por Europa Nostra a las más dispares obras de arquitectura y conservación del patrimonio español, lo que sitúa a España como el país europeo más premiado por el organismo europeo.
La visita al Real Sitio no es casual, dado que es uno de los tres únicos lugares galardonados de Castilla y León, por su modelo de gestión y desarrollo, con el premio Europa Nostra. Además, uno de los miembros destacados de Hispania Nostra, José María Ballester, que ejerciera durante 25 años como director de Cultura, Patrimonio Cultural y Natural en el Consejo de Europa, “adora Segovia y nos sugirió esta visita tan extraordinaria”, comentó ayer la presidenta de Hispania Nostra, Araceli Pereda.
Además de Ballester y Pereda, en la visita al Real Sitio también participó la delegada del alcalde del Real Sitio, Ofelia Miralles y otro ‘amante de Segovia’, como es el anterior presidente de Hispania Nostra y actual presidente de Patrimonio Nacional, Alfredo Pérez de Armiñán.
Pereda y Ballester explicaron que la visita a Segovia suponía el viaje para congresistas y acompañantes que ponía fin a los actos y actividades del aniversario de Hispania Nostra desarrolladas en Madrid, donde los participantes pudieron disfrutar también de visitas privadas al Museo del Prado y la sede de la Academia de Bellas Artes de San Fernando.
Pereda, en declaraciones a este diario, explicó que en la cita madrileña los expertos europeos analizaron los métodos, sistemas e instrumentos para poder articular de forma eficaz la participación de la sociedad civil en el campo del patrimonio.
A este respecto, Ballester admitió que “vivimos un momento particularmente importante”. “En los últimos años hemos asistido a una emergencia de la sociedad civil, a través fundamentalmente de las asociaciones en las políticas de patrimonio (…) en este momento de mutación social que vivimos la presencia y acción de las asociaciones y de la sociedad civil en general es mucho más importante”. Tanto Perela como Ballester destacaron que la cita de Madrid ha sido especialmente relevante “porque se ha discutido sobre como orientar, canalizar y organizar a la sociedad civil” para este propósito.
El evento, celebrado en el espacio Bertelsmann de Madrid ha servido para la presentación de la edición española de un libreto que contiene las investigaciones y propuestas de Europa Nostra y cinco asociaciones para facilitar la participación de la sociedad civil en la conservación del patrimonio.
En este sentido, Perela explicó que existen ‘nuevas fórmulas’, entre las que citó la puesta en marcha por Hispania Nostra; un programa de crowdfunding o micromecenazgo denominado “Todos a una”. “Las personas participa con aportaciones que van desde los cinco euros hasta la cantidad que quieran, con este sistema hemos puesto ya en marcha cuatro proyectos y, muy pronto, uno más, son sistemas nuevos que antes no existían”, explicó la presidenta de Hispania Nostra.
Tanto Perela como Ballester coincidieron en que España ha experimentado una notable evolución con respecto a la concienciación ciudadana en temas de patrimonio. “Existe, por fortuna, sensibilización”, apuntó el recién galardonado con la Medalla de Oro de las Bellas Artes. “Cuando yo empecé —apuntó Ballester— estábamos en los rudimentos de todo esto, pero ahora tiene una importancia social de tal calibre que hace que tengamos que ocuparnos de cómo conjugarlo con los poderes públicos”. “Tenemos que ver cómo conjugar esa fuerza emergente con las competencias que corresponden a las administraciones públicas”.