Este primer concierto del Curso de Canto, Técnica y Dirección Coral, que organiza desde hace quince años la coral Ágora en el verano segoviano, no pudo tener mejor presentación que un concierto del San Juan Bautista Abesbatza de Leioa. Es un coro juvenil, nacido desde un coro infantil, que se nos presenta con una composición de treinta voces de parecida edad, muy buenas voces y una dedicación al canto envidiable. Son voces muy afinadas, que se conocen entre sí muy bien y que cantan de una forma libre en sus gestos y en su voz y sobre todo de una manera muy disciplinada y atentas a todo lo que sugiere su director, Basilio Astulez, quien con una manera de dirigir muy singular y pareciendo que esculpe los sonidos, hace surgir lo mejor de todos ellos.
El programa contenía dos ejemplos de páginas pretéritas, una de Robert Lucas de Pearsall y otra de nuestro Tomás Luís de Victoria, del que se cumplen los cuatrocientos años de su muerte, el Lauda Sion, un broche de entrada de lo que son capaces. Fueron dos interpretaciones ejemplares, cuidadas hasta el más mínimo detalle de afinación, ataque y sobre todo plasticidad en las distintas cuerdas. Se dividen en sucesivas voces cuando es necesario y todos sus componentes van al máximo.
El resto del programa fue un despliegue de obras muy contemporáneas, con autores nacidos en la segunda parte del siglo XX, que dejaron un muestrario del buen hacer de una masa coral joven y disciplinada, comprometida con lo que hacen y pasándoselo muy bien porque lo bordan.
Hay una cierta tradición de los goliardos, medieval y muy bien tratada, que hace que el público, entre el que había representantes del curso que se está llevando a cabo en nuestra ciudad, se lo pasara muy bien y los que no somos alumnos también.
Son voces suaves pero con fuerza, con limpieza, con versiones frescas y alejadas de tópicos y que cuando la ocasión lo requiere, realizan el ejercicio corporal con sabiduría.
De los diferente números resaltaría el Benedictio de Urmas Sisask con un Amen final muy corto, definido y concreto que sorprendió. También el Sleep de Eric Whitacre, nacido en 1970, una partitura de mucha dificultad, con muchas disonancias perfectamente servidas limpiamente y con maestría.
Los dos últimos números fueron vascos, un ejemplar y tradicional villancico «Ator, Ator» en arreglo de Xavier Sarasola y un Sagastipean, canción a la vera del manzanal, de Javier Busto, muy bien escenificado y con un coro de chirriante coro de viejas junto con los tradicionales irrintxis, un hallazgo. Las voces graves, como es tradicional en los coros vascos, muy buenas.
Como bis nos ofrecieron una canción africana que hablaba del tradicional Mandinga.
Un concierto que contó con un público que abarrotó la antigua iglesia de San Juan de los Caballeros, muy unida a otro vasco genial, nuestro vecino y valedor, Don Daniel Zuloaga.
Intérpretes: San Juan Bautista Abestbatza. Basilio Astulez, director.
Obras de: R. L. de Pearsall, T. L. de Victoria, W. Hawley, Z. R. Stroope, E. Whitacre, J. Sandström, U. Sisask, J. Busto y X. Sarasola.
Fecha: Miércoles 24 de Agosto de 2011
Lugar: Iglesia de San Juan de los Caballeros.
Organiza: Coral Ágora, Fundación Don Juan de Borbón y Ayuntamiento de Segovia.
