Como ya sucediera hace casi un mes en el encuentro que le enfrentó al Inter Movistar, el Caja Segovia de fútbol sala buscará hoy, en el pabellón Pedro Delgado y ante el Marfil Santa Coloma, una victoria que le sitúe muy cerca de la clasificación para disputar el play off por el título de Liga.
Y lo hará en primer lugar mirando al cielo, aunque con un cierto alivio porque de nuevo la climatología ha decidido no perjudicar al equipo, y no se prevén lluvias que puedan dejar la cancha del Pedro Delgado más parecida a la piscina del “José Carlos Casado”. Ya les gustaría a los segovianos (y al concejal de Deportes el primero) que su pabellón más grande no tuviera goteras, pero…
Centrándonos en lo deportivo, el equipo segoviano, que en la jornada anterior logró un meritorio punto en la cancha del Azkar de Lugo, recibe en su pabellón al colista de la División de Honor, un equipo que no ha ganado en sus cuatro últimos desplazamientos, pero al que el Caja Segovia le tiene mucho respeto, ya que se está jugando sus últimas opciones de permanencia en la categoría y en sus últimos partidos fuera de casa ha puesto los “congojos” de corbata a ElPozo e Inter, que sólo pudieron ganar por la mínima (3-2).
Lo cierto es que Marfil tiene un sistema de juego que varía mucho de cuando juega en su pabellón a cuando lo tiene que hacer lejos del Jacint Verdaguer. Padú impone una defensa individual y muy agresiva presionando en toda la cancha, que supone mucho desgaste tanto para sus jugadores como para los rivales. Con el balón no les disgusta adelantar a su portero y asegurarse minutos de posesión, tratando de desquiciar al contrario y aprovecharse de sus errores. Será para el Caja Segovia un partido de concentración máxima, porque dependiendo de otros resultados, en el caso de ganar dejaría casi hecho su pase a los play off.
Resueltos durante la semana los problemas físicos que en la jornada precedente padecieron Arrivi y Andreu, la principal duda en el conjunto segoviano es la de Miguel Rodrigo, que a principios de semana anunció su marcha a Japón para dirigir a la selección nipona las próximas cuatro campañas, y que sufre un virus gastrointestinal que le ha postrado durante los dos últimos días en la cama.
Si el técnico no pudiera sentarse en el banquillo, sería el segundo entrenador del equipo, César Arcones, quien dirigiría al conjunto segoviano en un encuentro que desde el Caja Segovia se ha calificado de “trascendental” para la suerte del equipo en la recta final de la temporada, en la que cuerpo técnico y jugadores se han marcado el objetivo de alcanzar la cuarta plaza de la clasificación, actualmente en poder del Autos Lobelle.
