Por fin hubo sonrisas al final del partido. La felicidad llegó al Club Deportivo La Granja tras recoger la recompensa a su esfuerzo en forma del primer triunfo de la temporada (sin contar los tres puntos de la primera jornada, tras la alineación indebida del Valladolid B), en El Hospital y ante el Almazán.
La victoria fue por 1 a 0. Suficiente. Pero, puestos a pedir, y visto lo visto durante el partido, si La Granja hubiese metido un par de goles más no habría sido nada descabellado. Y es que los de José Luis Fernández tuvieron oportunidades de todos los colores, pero la puntería tardó en llegar 84 minutos, hasta que un remate de cabeza de Saúl hacía justicia con el gol que valía una victoria.
En cuanto a la alineación inicial, en el equipo de casa debutó en Liga el delantero César Bravo, recuperado de su lesión muscular. Además, destacó la presencia de Xavi en el lateral izquierdo de la defensa, en lugar de Ramón, que fue quien ocupó ese puesto el pasado domingo en León.
Al principio del encuentro de ayer los granjeños salieron muy decididos, presionando la salida del balón de su rival y muy atentos en defensa. Transcurridos los primeros cinco minutos la posesión estaba repartida.
En el minuto seis el local Mario fue el primero en atreverse a disparar a puerta, tras un recorte, con un fuerte tiro que fue despejado a corner por Heredia. Seguidamente, el Almazán respondió con un par de acercamientos.
El partido era un ir y venir, sin tregua. Saúl tuvo el 1-0 en el 13, pero su disparo a bocajarro fue parado con el cuerpo del defensa Márquez, impidiendo que alcanzara la portería.
De Miguel disfrutó de la ocasión más clara del Almazán hasta entonces, en el minuto 18, cuando recogió dentro del área un balón que llegó desde atrás pero, al recortar para buscar la pierna buena, se le echaron encima dos defensas.
Aún así, las oportunidades más peligrosas –es decir, las que veían puerta– eran para La Granja, como la que dispuso César Bravo, sin dejar caer el balón. Pero el guardameta visitante mostró seguridad en todo momento.
A pesar de que los sorianos no lo ponían nada fácil, los de casa tenían claro que el juego debía pasar por el centro del campo, y que el patadón no valía para nada.
Cerca de la media hora un error de Lamas, que fue subsanado por él mismo a continuación, dejó a De la Rosa solo ante Yiyo. Pero lo que pudo ser el 0-1 se convirtió en un simple corner, ya que el Almazán parecía tener la pólvora mojada.
De todas maneras, cuando más cerca estuvo el gol fue en la oportunidad de Adrián en el 31, que estrelló el balón en el larguero tras culminar una jugada que pasó antes por César Bravo y Mario.
Al descanso se llegó sin goles, y tras él, en su inicio. más de lo mismo de la primera parte, solo que esta vez con un juego incluso más trabado y con más peligro visitante que local.
Pero todo mejoró para los locales. Solo ocho minutos pasaron hasta que Chiqui salió al campo sustituyendo a César Bravo. De esta manera, Domingo se colocó de delantero centro, y suyas fueron las dos ocasiones más claras de estos minutos. Pero los lanzamientos del granjeño se marcharon desviados.
El gol no llegaba y los nervios empezaban a aflorar. Mucho más cuando, en el minuto 63 Saúl, solo a puerta vacía, desaprovechó la cesión del recién entrado en el campo, David, que se estrenaba ayer con La Granja.
Tras esta oportunidad con mayúsculas el encuentro se rompió completamente, algo que no beneficiaba a La Granja. Ante tanto descontrol, el partido podía caer de cualquier lado. Y fue del lado granjeño.
En una de las muchas llegadas por la banda Óscar Muñoz centró al segundo palo donde Saúl, de cabeza, cruzó el balón hacia el fondo de la portería.
Aún quedaban por delante 10 minutos (6 más la prolongación), pero La Granja supo administrar muy bien el tiempo, e incluso se quedó muy cerca de marcar el segundo gol, con las oportunidades de David y de Iván Yubero.
