El Adelantado de Segovia
viernes, 28 noviembre 2025
  • Segovia
  • Provincia de Segovia
  • Deportes
  • Castilla y León
  • Suplementos
  • Sociedad
  • Actualidad
  • EN
El Adelantado de Segovia

«Con El Adelantado de Segovia viví el cuarto secuestro político del periódico»

por
15 de abril de 2017
en Segovia
Angel Vilches en su casa de Torrecaballeros. / Teresa Sanz Nieto

Angel Vilches en su casa de Torrecaballeros. / Teresa Sanz Nieto

Compartir en FacebookCompartir en XCompartir en WhatsApp

“Es mucho más fascinante adentrarse en nuestra fisiología que pensar que algo es mérito de Cupido”

“La provincia que más depósitos tiene del Museo del Prado en toda Castilla y León es Segovia”

“Busco rescatar del olvido la herencia jurídica hispana reivindicando su profundidad conceptual”

Periodista, fundador en plena Transición del Diario de Castilla y, antes, director de El Adelantado de Segovia, fue conocedor directo de la ciudad en los últimos años de la Dictadura e inicio de la Transición, que vivió muy joven. Contó la muerte de Franco desde el diario decano de la prensa, aquel 20 de noviembre de 1975, lo que le costó su cabeza y a El Adelantado el cuarto secuestro de su historia.

— ¿Cómo llegó desde Madrid un joven de 24 años a dirigir El Adelantado?

— Había estudiado en la Escuela de Periodismo. Me había casado con 21 años y había trabajado en RNE, en TVE, en la creación del Diario Nivel, dirigido por Martín Ferrand; en la revista SP, dirigida por Rodrigo Royo; en Cedula. Mi padre era falangista joseantoniano y, cuando con el cierre de Nivel, me quedé sin trabajo, ya con una hija, recurrí a él. Me ofreció trabajar en censura de prensa, de Fraga, que acababa de dejar de serlo y pasar a ser la Dirección General de Prensa, que actuaba como censura encubierta. Llegaban todas las ediciones del país para revisar y retirar lo ‘peligroso’.

Estuve un año en el peor turno. Un día, un compañero me dijo que el director general quería verme. Pensé que me iban a despedir, como había sucedido con otros compañeros, por dejar pasar informaciones. Alejandro Fernández Sordo, que llegó a ser el último Ministro de Relaciones Sindicales, me recibió cordialmente y me contó que tenían problemas con un periódico en Segovia cuya familia no encontraba director. Pregunté si era del movimiento y me dijo que no, de propiedad familiar. Me dieron el teléfono de Carlos Herranz, llamé y me citó para esa misma tarde. Hablamos largas horas y el 15 de enero de 1973 ya estaba viviendo en Segovia.

— ¿Cómo recuerda aquella Segovia?

— La situación era muy espesa en toda España, con detenidos que se tiraban por la ventana; brigadas parapoliciales de control; jóvenes falangistas en plena efervescencia, que más tarde asesinarían a los abogados laboralistas de Atocha. Fueron los coletazos del final del Franquismo: el proceso de Burgos y los Fusilados del Río Manzanares…ése era el ambiente.

— ¿Y en Segovia?

— Hay una anécdota que lo resume: A mi toma de posesión vino Cirilo Rodríguez, corresponsal de RNE en Nueva York, de vacaciones aquí. Hablábamos a diario cuando él mandaba sus crónicas y yo hacía desde RNE una rueda de corresponsales para el informativo de la mañana. Me abrazó y me dijo: ¡Qué alegría, pero ten cuidado que Segovia es un avispero y no vas a durar ni un año en el cargo!”.

El segundo aviso me lo dio un segoviano: Perico Moreno: “Angelito, consúltame lo que quieras, que no tienes ni idea de en qué avispero te has metido”. Era una ciudad retraída y con miedo. Llegué con ímpetu y ganas de darle la vuelta a un periódico que lo necesitaba. Durante mucho tiempo, el editor, Carlos Herranz, y yo nos llevamos muy bien, aunque esa Segovia gris le recriminara el nuevo rumbo que iba tomando el periódico. Me regañaba a veces y echaba balones fuera. El primer año observé: talleres, redacción y la ciudad. En esa época las fuentes de información principales fueron Paco Rodríguez de Paula y Luis Martín. A partir del primer año, hicimos todas las reformas técnicas y reforzamos la imprenta para que, si bajaba la tirada, como sucedió, los ingresos equilibraran la pérdida de lectores.

— ¿Cómo se explican los secuestros anteriores al de la muerte de Franco?. ¿Se consideraban algo ‘normal’ en virtud de la autoridad gubernativa?

— Si tú no molestabas al Régimen, el régimen toleraba casi todo. La Ley de prensa de Fraga hizo recaer toda la responsabilidad de los periódicos sobre el director, por encima, incluso del editor. El punto de divorcio entre el Régimen y El Adelantado derivó del nombramiento de Luis Julve como Gobernador Civil. Estaba en trámite la nueva Ley de Régimen Local por la que los alcaldes y diputados provinciales no serían nombrados por los Gobernadores sino por algo parecido a la democracia orgánica. Los gobernadores actuaban con cierta prudencia, pero Julve no. Con el anterior gobernador, Mariano Pérez Hickman-rey, nos entendimos bien e hicimos muchas cosas, como el Bimilenario de Acueducto, los nuevos planes de financiación que Adolfo Suárez había puesto en marcha , la promoción del patrimonio y desarrollo de Segovia, en la que estaban implicados José Miguel Useros, Alberto García Gil, José Miguel Merino de Cáceres, todo ese patronato que trataba de administrar los recursos que había logrado Suárez para la provincia de Segovia, la modernización, el agua corriente, carreteras, alcantarillado, el Parador, la residencia sanitaria.

Julve lo primero que hizo fue cesar al alcalde de Nava de la Asunción y al presidente de la Diputación. Eso irritó a todos y El Adelantado informó de ello. Me amenazaron con el primer secuestro, pero dije que no quitaba nada, y lo secuestraron. Siete días después, se repitió. Carlos Herranz siguió apoyándome, pero mi divorcio con él, fue determinante. Nos habíamos enfrentado por el tema del agua, que se estaba decidiendo en aquel momento. Las expectativas sobre los embalses nos enfrentaron. Yo había tenido varias reuniones off the record con el presidente de la CHD, que me había explicado que el mejor embalse era el que podría ir en el vado la reina: el más barato de hacer, con mejor altura y calidad el agua. Me dijo: le voy a enseñar una carta del presidente de Patrimonio Nacional, Fuertes de Villavicencio, en la que dice que esa opción es intocable. Vine, me reuní con los colectivos que hacían estudios sobre el problema del agua y el periódico se posicionó desde el punto de vista técnico por el vado de la reina. Me enteré después de que el presidente de Patrimonio llamó al editor para amonestarle por la posición de El Adelantado.

Eso nos separó y cuando llegó el incidente de la muerte de Franco, la relación ya era otra, aunque siempre y hasta ahora, he tenido un afecto sincero por él, que no sé si es recíproco.

Compartir en Facebook122Compartir en X76Compartir en WhatsApp
El Adelantado de Segovia

Edición digital del periódico decano de la prensa de Segovia, fundado en 1901 por Rufino Cano de Rueda

  • Publicidad
  • Política de cookies
  • Política de privacidad
  • KIOSKOyMÁS
  • Guía de empresas

No Result
View All Result
  • Segovia
  • Provincia de Segovia
  • Deportes
  • Castilla y León
  • Suplementos
  • Sociedad
  • Actualidad
  • EN

Edición digital del periódico decano de la prensa de Segovia, fundado en 1901 por Rufino Cano de Rueda