Uno de los problemas más grandes con el que viven los vecinos de El Espinar es el mal estado del centro de salud, que atiende a las más de 10.000 personas que se encuentran empadronadas y a muchos desplazados. La falta de mantenimiento en los últimos tiempos ha provocado que el edificio tenga carencias estructurales muy peligrosas que ponen en riesgo a todos los pacientes.
Los vecinos llevan meses reclamando una reforma de los accesos, así como su adaptación para personas discapacitadas que cumplan con las normativas. Estas demandas han sido recogidas por el equipo de Gobierno, concretamente por el alcalde de la localidad, Javier Figueredo, que ha mantenido varias reuniones con el equipo médico del centro y con el servicio territorial de Salud de la Junta.
Tras realizar varias peticiones y mantener sendas reuniones, las obras han dado comienzo esta semana. La Junta va a financiar un arreglo íntegro de la parte exterior del edificio y de las fachadas que se encuentran muy deterioradas. Además, se va a proceder a la reparación de varias goteras y pequeños desperfectos en su interior.
Aunque estas obras no solucionan la totalidad de los problemas de un centro que se encuentra completamente obsoleto, sí que van a servir para poder ofrecer un mejor servicio y, sobretodo, no poner en riesgo a los vecinos que acuden al médico para ser atendidos. La población ha crecido exponencialmente en los últimos tiempos y la necesidad de un centro médico nuevo, moderno y dotado de material y personal adecuado se hace cada vez más urgente. Desde el Ayuntamiento y desde la oposición han trasladado en varias ocasiones este problema a la Junta, pero no han sido escuchados. Desde el Consistorio ruegan a los vecinos “paciencia y precaución al acceder al edificio y al circular por sus inmediaciones” durante las semanas que duren las obras de reforma.
