La Guardia Civil, en colaboración con la Dirección General de Calidad y Sostenibilidad Ambiental y los Servicios Territoriales de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, procederán desde el día 1 de abril próximo, en todo el territorio de la Comunidad Autónoma, a una intensificación de los servicios de control de los transportes de residuos de construcción y demolición (RDC) al considerarlos de interés para detectar los traslados ilícitos y la gestión inadecuada de este tipo de residuos.
La campaña se centrará tanto en los residuos procedentes de la construcción de infraestructuras y edificaciones de nueva planta, como de la demolición de inmuebles, sin olvidar los derivados de pequeñas obras de reforma de viviendas y locales.
Durante esta campaña se comprobará que el transportista esté registrado para el transporte de residuos, la documentación identificativa del residuo, la inspección física del mismo, así como la obra de origen y que el destino sea una instalación autorizada.
Esta campaña específica estará vigente hasta el 31 de diciembre del presente año y hasta esa fecha se realizarán varias fases de intensificación.
Como se recordará, Junta y Consorcio Provincial de Medio Ambiente firmaron el pasado mes de noviembre un convenio de colaboración para la eliminación de los 158 depósitos de residuos irregulares existentes en la provincia.
“El objetivo es cero escombreras al finalizar esta legislatura”, señaló entonces el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, en una prueba de la contundencia con que la Junta quiere acabar con esta lacra, de la que la provincia de Segovia no ha conseguido librarse.
Después de que Segovia haya quedado “libre de vertederos” —según la expresión utilizada por Suárez-Quiñones—, ahora procede acometer una segunda fase, la de eliminación de minivertederos o escombreras que en número de 158 afean y degradan el medio natural de la provincia. En ese sentido, el consejero recalcó su deseo de acabar definitivamente con ellos. “No se corresponden con la categoría de Segovia”, remarcó.
En la búsqueda de ese objetivo, Junta y Diputación se van a repartir las tareas. La Consejería de Fomento y Medio Ambiente será responsable de contratar y ejecutar los trabajos de restauración de las escombreras, así como de las asistencias técnicas necesarias, tales como proyectos técnicos, direcciones de obra o asistencias técnicas a éstas. La financiación de estos trabajos de restauración de las escombreras tendrá un importe máximo de 1,1 millones de euros.
Además, Fomento y Medio Ambiente se compromete a promover una campaña dirigida a concienciar a la población sobre la adecuada gestión de los residuos de la construcción y demolición generados en obras menores.
