La Universidad Europea Miguel de Cervantes, en Valladolid, acogía este fin de semana el Torneo Clasificatorio de la First Lego League (FLL), del que salió el equipo vencedor, que asistirá a la gran final que se celebrará en Logroño, los días 10 y 11 de marzo. Hasta allí se desplazó un grupo de estudiantes del colegio Claret, con su proyecto ‘InnoSegovia’, que no resultó ganador, pero sí se alzó con el Premio AQUONA al Proyecto Científico, por desarrollar un “proyecto innovador” sustentado en una sólida innovación científica, además de combinar “con gran ingenio” tecnologías novedosas para lograr mejorar el ciclo del agua humano, así como por haber expuesto el proyecto de una forma “ejemplar y enormemente creativa”, según la información publicada por Europa Press.
El equipo ‘Robots en construcción’, del Colegio San Agustín de Valladolid, fue el ganador del Torneo Clasificatorio de Valladolid. El jurado valoró su respeto por los valores de la FLL y por haber conseguido “la excelencia e innovación tanto en el proyecto científico como en el diseño y comportamiento del robot”, lo que les hizo merecedores del Premio Fundación Scientia al Ganador de la fase local.
OTROS PREMIOS El Premio al comportamiento del robot recayó en el equipo ‘H2O Maristas’, del Colegio Maristas Castilla de Palencia, por conseguir el mayor número de puntos en el juego del robot, cubriendo en cada ronda con “gran destreza, precisión y técnica, las misiones del desafío Hydrodynamics”.
Asimismo, el Mejor diseño de robot, que premia la innovación, creatividad, diseño mecánico, programación, estrategia e innovación, fue para el equipo ZETAV, del IES Zorrilla de Valladolid. El jurado destacó la “gran capacidad creativa” desarrollada a nivel global en el “impactante” diseño mecánico con una programación “clara, eficiente y profesional”, demostrando una estrategia de trabajo “innovadora”.
Y, por último, el Premio UEMC a los valores FLL, al equipo modelo a seguir por su respeto y defensa de los valores de la FLL, fue para Crobots Aqua, del Instituto Politécnico Cristo Rey de Valladolid, por alcanzar y defender con “enorme pasión e ilusión” estos valores, demostrando un gran entusiasmo por la ciencia y tecnología, además de por haber desarrollado “un espíritu de equipo y de trabajo colaborativo”.
