Ando fascinada con el nuevo paradigma que nos regala la inteligencia artificial que ya está transformando muchos aspectos de la vida moderna.
Todos tenemos claras algunas de las aplicaciones de la AI al deporte que traen inmediatez desde la parametrización de datos para proyectarse en tiempo real. Pero es que las posibilidades son muchas en referencia a la salud del deportista, al I+D, la evaluación de datos técnicos de instalaciones y elementos del juego u oportunidades tanto cuantitativas como cualitativas en la gestión deportiva.
Esta revolución lleva pareja algunas amenazas, especialmente éticas, pero estoy segura de que sabremos gestionarlas y exprimir las oportunidades.
En mi trayectoria profesional, los cambios tecnológicos son hitos relevantes que siempre he aplicado con optimismo. La aparición de internet o la irrupción de las redes sociales, por ejemplo, supusieron un apasionante reto en mis propuestas de gestión deportiva. Cuando Facebook irrumpió en España en 2009 y pocas personas veían en la plataforma las oportunidades de interacción, mi apuesta fue firme, yo aún era directora de Marketing de la Liga Nacional de Fútbol Sala que ya había implementado con éxito la web, videojuegos de móvil y otros avances tecnológicos y por supuesto creé un perfil que inmediatamente identificamos como un soporte imprescindible y un activo comercial y que hoy cuenta con 436.000 seguidores. La aplicación de la Inteligencia Artificial, aún en pañales, ya proporciona un salto increíble.
Llevo unas semanas charlando con Chat GPT de varios asuntos, entre otros, el deporte segoviano, hablamos de los Clubes, de los deportistas, me aporta datos e interactuamos para aprender juntos y proyectar nuestro deporte en la nueva revolución.
