CCOO de Segovia ha alertado de que la nueva normativa sobre centros residenciales para personas mayores y dependientes no recoge la obligatoriedad de disponer de personal sanitario, al menos de médico/a y enfermeros/as.
A través del Sindicato Provincial de Sanidad y Sectores Sociosanitarios, Comisiones informa de que el Decreto 2/2016, de 4 de febrero, de autorización y funcionamiento de los centros de carácter social para la atención a las personas mayores en Castilla y León, publicado en el BOCYL del pasado 5 de febrero por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, no prevé en las ratios de profesionales necesarios para el funcionamiento de los centros ni a médicos ni a enfermeras, mientras que el anterior decreto, de 2001, recogía una serie de requisitos, como horas prestadas por este personal sanitario en los centros, en función del número de residentes.
CCOO advierte de que, de esta manera, la Junta “liberará” a las residencias del gasto que supone contar con un equipo sanitario, ya que será la Consejería de Sanidad la que asumirá la responsabilidad, lo que implica “un importante cambio en la política sanitaria” respecto a estos centros.
Las funciones realizadas en la actualidad por médicos y enfermeras, recogidas en el VI Convenio de la Dependencia, Anexo III, serán asumidas por profesionales de los centros de salud, de manera que en cuatro años el Sacyl y sus profesionales tendrán que asumir el cien por cien de la asistencia y el gasto correspondiente, según señala Comisiones, que manifiesta su preocupación “por no existir desarrollo normativo, ni personal, ni recursos económicos para dotar de esos servicios”.
Por ese motivo, el sindicato en Segovia reclama al Sacyl un aumento de la plantilla de Atención Primaria, que considera debe realizarse con urgencia “para eliminar acumulaciones y sobrecargas de trabajo y adoptar las medidas necesarias para la prestación de un servicio sanitario digno para todos los usuarios”.
En este sentido, indican “las penosas laborales que ya hoy tienen los profesionales de Atención Primaria”, por lo que, a juicio de CCOO, en este momento es incompatible “con una mínima calidad asistencia” si además estos profesionales tienen que encargarse “no solo de las urgencias, sino del quehacer diario de los centros para la Tercera Edad de los pacientes de su cupo”.
Añade otras consideraciones que implica el Decreto, como pérdida de puestos de trabajo en las residencias, incremento de cargas de trabajo de las gerocultoras y mayor dificultad para una asistencia de calidad.