Los consejeros de Fomento e Infraestructuras de Castilla y León y de Galicia, Antonio Silván y Agustín Hernández Fernández, respectivamente, y el alcalde de Ponferrada, Carlos López Riesco, coincidieron ayer en considerar las infraestructuras viarias y ferroviarias del noroeste español como «prioritarias» para ambas comunidades y para el conjunto de España.
En una reunión de seguimiento del grupo de trabajo para el desarrollo de las infraestructuras viarias y ferroviarias que afectan a los dos territorios, los responsables de las tres administraciones insistieron en la necesidad de conocer plazos e inversiones detalladas de dos infraestructuras fundamentales para ambos territorios.
En lo que se refiere a infraestructuras viarias, la A-76, de Ponferrada a Orense y, en lo que se refiere a infraestructuras ferroviarias, el AVE Ponferrada-Monforte.
El consejero de Fomento de la Junta de Castilla y León, Antonio Silván, consideró que la máxima «lo que es bueno para Galicia es bueno para Castilla y León y lo que es bueno para Castilla y León es bueno para Galicia» es el marco de referencia de las actuaciones. Asimismo, solicitó un «calendario realista, una inversión detallada y plazos posibles» en referencia a la autovía A-76 y al AVE Ponferrada-Monforte.
Además, las diferentes administraciones recordaron que se ha trasladado ya en diversas ocasiones la priorización de estas infraestructuras. De esta forma, el consejero de Fomento de Castilla y León señaló que se espera poder trasladar «en breve», en la Conferencia Sectorial de Infraestructuras y Transportes que reúne a las Comunidades autónomas con el Ministerio de Fomento, «la necesidad de conocer plazos e inversiones de las infraestructuras del Noroeste español».
«Se trata de una reunión que llevamos esperando desde noviembre y confiamos que pueda celebrarse muy próximamente», concluyó.
Por su parte, el consejero de Infraestructuras de la Xunta de Galicia apostó por la necesidad de mantener «una voz única» desde el noroeste español, algo en lo que encuentros como el celebrado este jueves en Ponferrada permiten «contribuir a marcar plazos y demandas legítimas», al tratarse de una zona «perjudicada» en materia de infraestructuras.
