La consejera de Sanidad, Verónica Casado, considera a las diputaciones provinciales como unas instituciones esenciales a la hora de organizar e implantar el nuevo modelo de atención sanitario en el entorno rural de Castilla y León, por lo que pidió su colaboración y participación.
Bajo esta premisa, Casado se reunió ayer en Valladolid con los presidentes y presidentas de las nueve diputaciones para analizar cuestiones de interés común a todas ellas, y articular canales de diálogo con el fin de satisfacer cuantas necesidades se detecten, han informado fuentes de la administración autonómica.
La consejera explicó a todos ellos las líneas básicas de actuación y desgranado las ventajas de un modelo en fase de gestación y que al renovar el anterior, con más de tres décadas de antigüedad, aspira a una mayor sostenibilidad en el tiempo y accesibilidad para todos los pacientes, según las mismas fuentes.
Entre otras ventajas, destacó la consulta diaria, tanto de médico como enfermería a escasa distancia del domicilio del paciente, sin perjuicio de la atención en consultorios locales y a domicilio.
Al tiempo que se mejora la atención a la paciente, según la Consejería de Sanidad, se profundiza en la calidad al disponer en los Consultorio Rurales de Agrupación del acceso a la historia clínica tanto de Atención Primaria como del hospital de referencia, además de a la receta electrónica.
Reduce el tiempo que emplean los profesionales en desplazamientos y aumenta los tiempos en la consultas, añadió entre las ventajas.
La falta de profesionales y su elevada edad media (Castilla y León es la comunidad autónoma con mayor porcentaje de médicos por encima de los 50 años), también ha recordado la consejera durante la reunión, aunque es la segunda autonomía con más médicos por cada 100.000 habitantes, sólo superados por Extremadura.
De los 3.669 consultorios, el 45 por ciento tiene menos de cincuenta pacientes adscritos, con un 30 por ciento de médicos con menos de quinientas tarjetas sanitarias.
Castilla y León es la comunidad autónoma más extensa, con menor densidad de población (25,6 habitantes por kilómetro cuadrado) y una esperanza de vida superior a la media nacional (84,3 años), y además es de las regiones europeas con menor tasa de mortalidad infantil y mejores ratios en las encuestas de calidad.
