El presidente del PP, Pablo Casado, lanzó ayer una “propuesta de futuro” para afrontar la crisis en Cataluña que pasa por una aplicación del artículo 155 que se haga “inmediatamente y con la duración necesaria”, y todo ello “sin esperar” la postura del PSOE ni la de Cs.
Así lo puso de manifiesto durante su intervención en el marco del XIV Congreso del PP de Castilla-La Mancha que sirvió para renovar el liderazgo del partido en la persona de Francisco Núñez, donde explicó que la aplicación de ese 155 habría de servir para “recuperar el control” en Cataluña y que el Estado asumiera las competencias de, entre otras cosas, la policía autonómica, las instituciones penitenciarias o la televisión.
“Para que el Estado vuelva a recuperar el control necesitamos que la educación se recupere, que los Mossos no tengan órdenes ilegales, que no haya propaganda en TV o que las instituciones penitenciarias no estén al albur de lo que quieran los presos”, señaló Casado. Además, hizo extensiva la acción de este hipotético 155 a “evitar que haya malversación de fondos públicos para segmentar a los niños en los recreos o catalogar a funcionarios y jueces por su ideología”.
Para Casado, el 155 “es urgente”, y el año pasado “se activó sólo para convocar elecciones por la exigencia de Ciudadanos y sin ocupar estas competencias porque así lo pidió e PSOE”.
Por ello, defendió que el compromiso del PP es, en cuanto llegue al Gobierno, aplicar el 155 “sin esperar ni a Cs ni al PSOE y poniendo rápidamente orden en Cataluña”. “Lo que está pasando es desgarrador”, lamentó.
El líder popular se hizo eco de la información por la cual Oriol Junqueras y el resto de independentistas en prisión preventiva habrían obtenido “privilegios” una vez llegados a cárceles catalanas.
“Ayer supimos que en España no todos los presos son iguales. Que hay cárceles de primera y de segunda, y presos de primera y de segunda. Que hay un Gobierno que hace unos meses decreto el traslado de los presos golpistas a Cataluña y que lo que querían era tener una cárcel a medida”, apuntó.
Así, criticó que ahora estos presos tengan “una cárcel a medida”, y mientras el Parlamento catalán “está cerrado” en las prisiones hay “jornadas de puertas abiertas”. “Y esto no lo vamos a tolerar”, señaló, para insistir que con el 155 que propone su partido se recuperarían las competencias de las instituciones penitenciaras catalanas.
En su opinión, que haya distinción de clases entre los presos “sólo pasa en las dictaduras donde los disidentes son peor tratados, o en los narcoestados donde los narcos compran un régimen carcelario mejor”.
“Yo no quiero que en España pase como ha pasado en repúblicas bananeras que, dependiendo del preso, hay regímenes distintos”, enfatizó el líder del partido de la oposición.
Lo “peor” según el dirigente popular es que el Ministerio de Interior “se lava las manos y dice que no es su responsabilidad”. “¿Entonces por qué les trasladaron a Cataluña?”, se preguntó.
Continuando con sus recetas para la situación en Cataluña, propone “tipificar el referéndum ilegal” para que haya “sanciones penales” en caso de repetirse un 1-O. “Con eso nos hubiéramos ahorrado disgustos”.
Plagio de Ejecutivo
Modificar la Ley de Acción Exterior para poder cerrar “embajadas y oficinas comerciales de nacionalistas”; o modificar la ley de partidos políticos “para que ninguna formación tenga dinero público para alentar la violencia” son otras de las propuestas de Casado al respecto.
“Para que no veamos pancartas rezando ‘Visca Terra Lliure’, organización terrorista que asesinó empresarios. Eso fue Tierra Lliure, y ahora tenemos a niñatos gritando eso mientras dan puñetazos en la cara. Eso no se puede tolerar”, dijo.
De su lado, la ya expresidenta del PP en la región María Dolores de Cospedal, que también participó en el acto, tuvo palabras para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. “No es un Gobierno, es un plagio de Gobierno. Es un señor que ha querido ser presidente a toda costa y que se ha cogido el Falcon para ir a ver un concierto de los Killers”, criticó.
Así, ahondó en que la política de Sánchez para asegurar que basa su acción en “hacer fractura social”. “Si sólo falta que quieren hacer espiritismo en el Valle de los Caídos”, indicó.
Finalmente, habló del “amor profundo” que siente por España, un amor que a los del PP —apostilló— les llega como “un amor de juventud”, un amor del que “no te separas y no te divorcias” y, además, es un amor “promiscuo”, porque lo puedes compartir con todo el mundo. “A diferencia de ese nacionalismo excluyente, nuestro amor por nuestro país y nuestro patriotismo constitucional es grande”, subrayó.
