Bajo un intenso sol prácticamente de verano pese a que el calendario continúa empeñado en señalar que aún es primavera, Carbonero el Mayor vivió el pasado sábado una de sus jornadas más emotivas del año con la tradicional romería en honor a su patrona, la Virgen del Bustar. Fiel a la costumbre que data al menos de 1553, los mayordomos, vecinos y visitantes se congregaron en la ermita del Bustar para rendir honores a la talla románica del siglo XI, esculpida en madera y escondida durante la invasión árabe.
La romería, acogió a cientos de personas, entre las que se encontraban el consejero de Movilidad, José Luis Sanz Merino y la delegada territorial de la Junta de Castilla y León, Raquel Alonso. Ambos se sumaron a la comitiva y presenciaron los hitos de la fiesta, desde la eucaristía en el templo hasta las danzas populares y el tradicional castillo humano protagonizado por jóvenes de la localidad.
El fervor popular se hizo patente desde primeras horas con la algarabía de dulzainas y tamboriles. La salida de la imagen en procesión agrupó a distintas generaciones en una manifestación colorista y cargada de emoción, cubriendo el largo tramo desde la ermita hasta la iglesia parroquial de San Juan Bautista, convertida en escenario donde los jóvenes erigieron torres humanas aurorales ante la virgen.
Tras la misa, presidida por comisarios, mayordomos y priostes, la comitiva retornó al pueblo, culminando una la tradicional romería cuya continuidad ha sobrevivido a los siglos, tanto como la venerada talla de la Virgen, que, tras permanecer oculta en tiempos de ocupación musulmana, retornó al culto consolidándose en Carbonero el Mayor como símbolo de identidad religiosa
La tradición marca que la responsabilidad en el desarrollo del festejo recae cada año en los mayordomos, quienes velan por el orden religioso y cultural. La existencia de registros desde 1553 retoma una larga trayectoria histórica, refrendada además por la leyenda de la talla románica, resguardada en una gruta en lo que se representa como la resistencia de una comunidad frente al olvido.
