Un gol de Jermain Defoe dio a Inglaterra una raquítica victoria sobre Eslovenia y evitó que el bloque británico quedara eliminado en la fase de grupos de un Mundial por primera vez en medio siglo.
Eslovenia, con poco más de dos millones de habitantes y el país menos poblado de los 32 presentes en el Mundial, opuso seria resistencia un cuarto de hora. El mismo día en que se cumplían 36 años desde que Capello marcó en 1974 su único gol en la Copa del Mundo (Polonia, 2-Italia, 1), el técnico italiano encontró al equipo que había perdido en los dos encuentros precedentes.
El italiano se ratificó en el esquema 4-4-2 alineando a Defoe y a Milner en lugar de Lennon y Heskey, pero no adelantó la posición de Gerrard para ayudar arriba a Rooney, como le pedían los medios ingleses. Upson cubrió en el centro de la defensa la baja del suspendido Carragher.
La táctica no funcionó en los primeros minutos. Eslovenia tenía el balón y llegaba con más frecuencia al área adversaria, sin problemas, en defensa, para anular a un solitario Rooney, pero la presión inglesa fue en aumento.
En el minuto 23 Milner centró al punto de penalti desde la derecha y, en pugna con Suler, Defoe metió la bota para batir a Handanovic, que no pudo atrapar el balón entre sus manos. Con el otro partido (EEUU-Argelia) empatado a cero, Inglaterra se encaramaba al primer puesto del grupo.
Su rival empezó a descomponerse. Cuatro minutos después, Lampard lanzó alto un rechace de la defensa desde el borde del área. La escuadra insular se sacudió los nervios y empezó a mover el balón. Lampard, Gerrard, Defoe, bombardeaban la portería eslovena. Momentos de agobio para Handanovic, que salió airoso.
También el portero británico, David James, tuvo trabajo, especialmente para despejar con los puños, al borde del descanso, un disparo envenenado de Birsa.
Inglaterra salió en busca de la sentencia tras el descanso. Defoe tuvo una buena ocasión ya en el minuto 47, poco después Rooney no entendió una pared con Gerrard y en el 58 el propio Rooney disparó al poste. Capello se desesperaba en el banquillo.
El partido perdió claridad en acciones apresuradas, ahora ya con Eslovenia precipitándose en sus acciones para buscar el empate, porque un gol de EEUU en el otro duelo le dejaba fuera del Mundial.
Coincidiendo con el final del choque, se produjo la fatal noticia para Eslovenia. Donovan marcó en el 92 el gol de la victoria -y la clasificación- de Estados Unidos.
