Cantimpalos volvió a ser el punto de encuentro de un grupo de aficionados al ciclismo que, como cada verano desde la década de los 80, participaron en la ya tradicional Marcha de la Chuletilla. Esta cita, que se celebra de forma ininterrumpida desde hace más de cuarenta años, tuvo lugar el pasado domingo, congregando a una veintena de ciclistas, muchos de ellos vecinos del municipio y otros llegados desde distintos puntos, como David Matarranz, participante procedente de Villaviciosa de Odón (Madrid).
La jornada arrancó en la Plaza Mayor de Cantimpalos, junto al Ayuntamiento, para completar un exigente recorrido de 138 kilómetros. La ruta atravesó los municipios de Pinillos de Polendos, Villovela de Pirón, Turégano, Veganzones, Valdesimonte, Sepúlveda, Ureñas, Castroserracín, Castro de Fuentidueña, Fuentesoto, Calabazas de Fuentidueña, Fuentesaúco de Fuentidueña, Cozuelos de Fuentidueña, Hontalvilla, Lastras de Cuéllar, Escalona del Prado y Aguilafuente, finalizando de nuevo en Cantimpalos.
Durante el recorrido, los ciclistas pudieron disfrutar de la diversidad paisajística y del valor ecológico de la zona. Como broche final, los participantes se reunieron en la terraza del conocido Bar Piche de Cantimpalos, donde fueron recibidos con un excelente trato por parte de Begoña y Sandra, y pudieron degustar las tradicionales chuletillas de cordero, acompañadas de una refrescante ensalada. La comida se convirtió, como es habitual, en una animada sobremesa donde compartieron experiencias y anécdotas de las marchas realizadas a lo largo del año.
