La Sociedad Anónima de Caución Agraria (SAECA) y Cajaviva Caja Rural suscribieron un convenio de colaboración cuyo objetivo es seguir financiando en las mejores condiciones a autónomos, pequeños y medianos empresarios y entidades asociativas del sector primario, a los profesionales titulares de explotaciones agrarias, ganaderas, pesqueras y forestales, así como de cualquier actividad que redunde en la mejora del medio rural.
El acuerdo da paso a operaciones de préstamos de importes máximos que oscilan entre los 250.000 euros y los 400.000 euros, en función de si son personas físicas o jurídicas, y podrán llegar hasta los 13 millones de euros en operaciones a comunidades de regantes para la modernización y/o creación de infraestructuras de riego.
El objetivo es que “no haya ni un solo agricultor que se quede sin financiación”, señaló el director de Cajaviva, Ramón Sobremonte, en un año complicado para el sector agrícola y ganadero, con previsiones de cosecha negativas por la sequía del mes de mayo, especialmente, en Burgos, Segovia y Soria, según Agroseguro. A esto se suma también que “los precios no tienen una tendencia clara”, añadió Ramón Sobremonte.
Por ello, y basándose en la experiencia de Cajaviva en el ámbito agrario, “un año de mala cosecha suele ser un freno en las inversiones en el sector y hay que evitarlo a toda costa”, ya que “ahora está muy profesionalizado y tenemos que evitar que haya una paralización” en esa modernización.
Las inversiones que podrán acogerse a este proyecto son, entre otras, las vinculadas a la implantación de mejoras en la industria agroalimentaria, mejora o implantación de regadíos, la compra de tierras, la compra de maquinaria, la construcción de naves o estructuras agrarias o ganaderas, así como la compra o mejora de vivienda rural.
El convenio con SAECA permite, tal y como explicó el director general de la Sociedad, Rafael Pizarro, a los clientes que soliciten un crédito acceder a una serie de ventajas como, por ejemplo, no hipotecar sus bienes, ya que la garantía es personal; no pedir aval a terceros que puedan comprometer su futuro; contar con un plazo amplio para la devolución del préstamo, y tener unas mejores condiciones financieras.
