Juan David López, el primo de Ruth Ortiz, la madre de los niños de dos y seis años supuestamente asesinados por su padre, José Bretón, y que visitó al acusado en el Centro Penitenciario de Alcolea en Córdoba varios meses después de la desaparición de los pequeños, declaró ayer que el acusado le dijo «hasta tres veces que los pequeños estaban muertos».
En una de las sesiones más tensas del proceso, con el imputado negando con la cabeza las afirmaciones del testigo y el abogado defensor del sospechoso recriminando las «mentiras» de López, el exprimo político del presunto parricida aseguró que él era su «único amigo en Huelva», por lo que fingió ponerse de su parte para tratar de averiguar dónde estaban los críos. «Le dije que me estaba separando y que veía bien lo que había hecho», recordó.
«Estaba obsesionado con Ruth. En la primera entrevista en la cárcel, me dijo que ella se lo había buscado y que no iba a encontrar a los menores vivos», afirmó el primo político de la madre de los menores. No obstante, el testigo rememoró que, en su segunda visita, Bretón cambio su versión y le remarcó que «los niños están sanos y salvos». Ante esa novedad en su relato, Juan David le comunicó que no iba a volver a visitarle, ante lo que éste, según declaró el primo de Ruth, le hizo una escalofriante confesión: «Los críos están muertos, pero no sé como hacerlo… Me gustaría decir la verdad, pero ¿cómo se lo cuento a mi padre? Ésa fue la única vez que lloró», indicó.
El testimonio de López fue duramente criticado por la defensa de Bretón, que lo calificó de «parcial e interesado».
Por otro lado, los presos sombra que han estado con el acusado en el centro penitenciario de Alcolea, en Córdoba, desde su ingreso, describieron al recluso como una persona con muchas manías y manipuladora a la hora de tratar con unos y otros en la cárcel, al tiempo que, según ellos, criticaba continuamente a su exmujer con palabras despectivas, como «perra» y «asquerosa».
