El actor Bradley Cooper presentó ayer en el Festival de Cine de San Sebastián la película con la que da el salto a la dirección, ‘A star is born’ (‘Ha nacido una estrella’), una historia de amor que reflexiona sobre el camino al estrellato en el mundo de la música, protagonizada por él mismo y Lady Gaga.
Durante la rueda de prensa de presentación de la película, que participa en la sección ‘Perlas’, Cooper fue preguntado por el consejo para convertirse en una estrella de un día para otro. “Depende de lo que signifique para cada uno ser una estrella, pero si sientes una llamada, persíguela”, relató.
“Hay mucha gente que te dirá que no lo hagas, que no vales para eso. Pero tú tienes que rodearte de gente que te quiera y apoye para perseguir este camino”, añadió, tras recordar en su caso los apoyos que tuvo para dar el salto a al dirección, empezando por el encargo de Warner para un ‘remake’ de una cinta que ya se había hecho tres veces.
Directores como David O. Russell, Clint Eastwood, Todd Phillips o J. J. Abrams han desfilado por los agradecimientos del actor, quien ha recordado cómo le permitieron en muchas ocasiones ver cómo dirigían. “No sé si creían en mi como director, pero reconocieron mi curiosidad”, indicó, tras señalar que “siempre” fue un tipo “curioso” y ahora el trabajo detrás de la cámara le ha hecho “mejorar como actor”.
La clave para poner en marcha esta película (que llegará a España el 5 de octubre) fue convencer a Lady Gaga para que, además de los números musicales, interpretara su primer papel protagonista. “Todo el mundo conoce a Lady Gaga y es una de las grandes artistas de la Historia. Le hice una propuesta para que se entregara y aceptó y creo que es una actriz increíble”, aseveró.
Las canciones, compuestas en parte por la propia Lady Gaga, son parte principal de esta película, tal y como explicó el propio Cooper. “Fue un proceso que iba con la evolución de la película y permite reflejar lo que sucede entre ambos personajes”, matizó el actor, para quien fue necesario un trabajo exhaustivo de su voz y clases musicales para “ser lo suficientemente creíble”.
“Estaba con un entrenador de voz desde las 7.00 de la mañana, una hora en la que los músicos nunca trabajan la voz, y pasé tiempo con músicos que al final fueron mis amigos”, explicó, que en la película aparece tocando la guitarra y el piano. Incluso bromeó con la posibilidad de participar en ‘Operación Triunfo’, “me tendré que apuntar”, respondió a una pregunta sobre este programa, y descartó que haya un álbum con su nombre: “ni yo querría escucharlo”.
Nominado cuatro veces a los Óscar (pero sin conseguir todavía la valorada estatuilla), el actor ve lejana la posibilidad de que se alce con ella en esta edición. “Me parece una broma esa pregunta, durante todo el camino para llegar a la gala conoces a mucha gente y con ese me quedo. Luego ganas o pierdes”, afirmó. Con ironía, no ha dejado de recordar que esta película “en principio era una mala idea: un remake de otras y con un director nuevo”, indicó.
Sin llegar a escoger una película como su favorita, para Bradley Cooper en todos los remakes anteriores de ‘A star is born’ hay “una identidad propia”. “Es fascinante como se ha ido contando en diferentes generaciones: con la película de Barbra Streisand y Kris Kristofferson, que yo nací un año antes, se pueden sentir las vibraciones de la época, pero la de Judy Garland y James Mason también me sorprendió”, destacó el actor.
