Si por algo se caracteriza Silvio Berlusconi es por no callarse, pese a que el protocolo o el sentido común así se lo requieran. Por ello, después de aseverar que su sucesor en el cargo, Mario Monti, está dejando Italia en una situación «mucho peor» de cómo se lo encontró, atacó a uno de los pilares de la Unión Europea al criticar que el primer ministro trabaja «para los intereses de Alemania», al tiempo que aseveró que no le preocupa el aumento de la prima de riesgo en el país porque, según declaró, «es un fraude y un engaño».
En una entrevista televisiva, en la que volvió a recordar a Il Cavaliere que cosechó odios y admiraciones en el pasado y en un claro guiño a un inicio de la campaña de cara a las elecciones del año que viene, el expremier censuró que Monti se «ha plegado» a las exigencias de Merkel. «Su política ha sido demasiado germanocéntrica», lamentó, para agregar que esto ha empeorado aún más la recesión transalpina. En cambio, según añadió, él «siempre» se resistió a los mandatos de Berlín durante sus Gobiernos.
Además, en cuanto a la reacción de la Bolsa de Milán el pasado lunes, después del anuncio del líder del Gobierno tecnócrata de que presentará su dimisión tras la aprobación de los Presupuestos Generales, Berlusconi aseguró que «no hay razón real para que los mercados se tengan que agitar».
«Basta de hablar de este engaño. Antes nunca habíamos oído hablar de la prima de riesgo. ¿Qué importa? Se ha utilizado para intentar abatir una mayoría votada por los italianos. Detrás de la crisis hay una estrategia alemana», insistió.
Ante tales acusaciones, el ministro de Exteriores germano, Guido Westerwelle, avisó de que Berlín «no se inmiscuirá» en la campaña electoral italiana, al tiempo que instó al exdirigente a cesar su batalla antialemana.
Mientras, Monti rechazó que existan «complots de fuerzas ocultas» entre los inversores tras la fuerte subida que experimentó la prima de riesgo a raíz del anuncio de su renuncia y defendió que no era posible salvar a Italia y lograr que al mismo tiempo creciera su economía. «Hay personas en los mercados que buscan sus propios intereses sin escrúpulos, remarcó el primer ministro, excluyendo así una campaña internacional contra el país.
Según el jefe del Ejecutivo, hay que tomarse con «calma y frialdad» las variaciones de los mercados y se mostró convencido de que estos «constatarán que en Italia hay un Gobierno en pleno ejercicio de sus poderes». No obstante, advirtió de que hay que «estar atentos y aparcar algunos mitos», como que solo el BCE es el que manda. «El banco central es uno. Sin embargo, la prima de riesgo española e italiana en los últimos meses han tenido comportamientos distintos», resaltó.
Por otro lado, Berlusconi aprovechó su intervención para apuntar que no descarta retomar la denominación de Forza Italia para su partido y remachó que solo el 10 por ciento de los parlamentarios actuales repetirá en las listas de 2013.
