Luis Bárcenas, el hombre que controló las finanzas del Partido Popular durante dos décadas, escribió ayer otra página de su particular intento de venganza contra la formación de Génova al poner en marcha el ventilador ante el juez Pablo Ruz, que investiga la presunta financiación ilegal del PP. El extesorero no dudó en desdecirse de sus primeras declaraciones, tanto judiciales como ante los medios, al asegurar ahora que sí fue el autor de los papeles en los que se reflejaba la supuesta contabilidad B de los populares. Además, el hombre de los 48 millones en Suiza aseguró haber entregado personalmente 45.000 euros en billetes de 500 a Mariano Rajoy y otros 45.000 a María Dolores de Cospedal entre 2008 y 2010, en dinero negro y en sobres de color marrón. Sin embargo, el que fuera también senador por Cantabria no aportó documentos de estos presuntos pagos ya que, según remarcó, «ni a los donantes ni a los receptores se les exigían recibís».
El extesorero, que salió por unas horas de la cárcel de Soto del Real en la que se encuentra en prisión incondicional desde hace dos semanas, admitió por primera vez en sede judicial la autoría de los papeles que reflejan una presunta contabilidad B del PP y entregó al magistrado distintos documentos relativos a esta cuestión. En esas cuentas en la sombra se refleja, según explicó Bárcenas en su comparecencia, una supuesta financiación ilegal de la formación durante al menos 20 años, con donaciones de empresas a la formación que superaban el límite legal y con otras que procedían de personas o firmas que no podían por ley hacer aportaciones a partidos.
El exsenador relató ante Ruz que este sistema para conseguir dinero se llevaba a cabo con un modus operandi que comenzó ya con el antiguo tesorero Rosendo Naseiro, que fue procesado por el Tribunal Supremo precisamente por un caso de financiación ilegal de la formación. «Vosotros nos ayudáis con las campañas electorales y nosotros con los contratos», indicó ante el juez.
El imputado señaló que, en ocasiones, era el propio «presidente o secretario general» del partido el que le avisaba a él o a Álvaro Lapuerta, su antecesor en el cargo, que iba a venir un empresario a entregar determinada cantidad de dinero dirigida a la financiación de las campañas electorales.
Asimismo, el que fuera dirigente financiero del partido subrayó que realizó entregas en efectivo en concepto de sobresueldos al líder del PP y actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y a la secretaria general María Dolores de Cospedal, durante 2008, 2009 y 2010. Bárcenas, no obstante, reconoció que carece de recibos que demuestren estos pagos.
Así, especificó que la primera de las retribuciones se realizaron tras el inicio del caso Gürtel, momento en el que la formación decidió liquidar la caja donde guardaba el dinero en efectivo procedente de los pagos realizados por distintos empresarios. Bárcenas indicó que en 2009 repartió los 40.000 euros depositados en la caja en dos partes que entregó a cada uno de los dos dirigentes.
Además, agregó que en 2010 pagó otros 25.000 euros a cada uno de los dos políticos. Ese dinero, que procedía de la devolución de un préstamo realizado al PP gallego, fue entregado en mano en billetes de 500 euros introducidos en sobres marrones. Cospedal recibió esta última cantidad, según Bárcenas, en su despacho de Génova.
Sobre la presidenta de Castilla-La Mancha, el que fuera responsable de la gestión económica del partido, señaló que conocía los sobresueldos y que fue quien decidió seguir pagándole tras cesar en su cargo.
Por otro lado, el extesorero afirmó ante el juez que él, personalmente, no realizó ninguna entrega de dinero en concepto de sobresueldos al expresidente del Gobierno José María Aznar, aunque sí realizó este tipo de pagos a otros altos cargos del partido.
Asimismo, aportó ante el magistrado el recibí por el presunto cobro en 2007 de una comisión de 200.000 euros a cambio de la adjudicación de un contrato en el Ayuntamiento de Toledo.
