El ex tesorero del Partido Popular (PP) Luis Bárcenas acusó a la formación política de contar un sistema de financiación paralelo desde, al menos, 1982 en el que los órganos de dirección y gestión eran “plenos conocedores” del origen y destino de las donaciones y que Manuel Fraga, José María Aznar y Mariano Rajoy recibieron donativos durante sus presidencias.
En el escrito de defensa, al que tuvo acceso Europa Press, los abogados del que fuera máximo responsable de las finanzas ‘populares’, Francisco Maroto y Joaquín Ruiz de Infante, explicaron que el manejo de donativos al margen de la ley era un sistema “perfectamente institucionalizado, donde, como en toda pirámide organizativa jerárquica, las instrucciones emanaban de arriba a abajo”, correspondiendo a Bárcenas una labor de “mero amanuense”.
Según detalló, durante el periodo comprendido entre 1982 y 1986, las máximas instancias de Alianza Popular utilizaron sociedades, como Sipsa, Opisa, Hermogenes, Hernández Carretero, para recibir ingresos por donativos, que eran recibidos fundamentalmente por Fraga y este los entregaba al secretario general o tesorero. La liquidación de estas mercantiles fue ordenada por el entonces tesorero Ángel Sanchís en este caso.
Entre 1987 y 1988, bajo la presidencia de Antonio Hernández Mancha, el secretario general Arturo García Tizón abrió una cuenta en el Banco de Fomento, en la cual se ingresaban los donativos, diferente a la de Alianza Popular. Desde 1989 a 1990, siendo presidente del partido José María Aznar, secretario general Francisco Álvarez Cascos y tesorero Rosendo Naseiro, las donaciones “las recibían el presidente y el secretario general, que se les entregaba al tesorero, que además gestionaba con empresarios aportaciones para el partido”, agregó.
El escrito precisó que Naseiro empezó a ingresar entonces en una caja ajena a la contabilidad oficial del partido.
