El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, afirmó ayer que en la entidad trabajan con el horizonte de privatización del 31 de diciembre de 2019, dado que consideran que “hay apetito por parte de los inversores”.
“Creemos que la privatización es muy importante, es el último aspecto que queda para la normalización del proyecto, y trabajamos con la referencia que tenemos que trabajar, que es que Bankia esté privatizada el 31 de diciembre de 2019”, señaló durante la presentación del plan estratégico 2018-2020. Un programa que prevé que el banco alcance un beneficio de 1.300 millones de euros en el tercer año, un 62% más que en 2017, y reparta unos 2.500 millones de euros en dividendos durante el trienio.
Además, Goirigolzarri explicó que en el banco trabajan con la idea de que “hay apetito por parte de los inversores por Bankia”. “Hoy salimos de ‘road show’ para explicar a inversores internacionales el plan estratégico y creo que será bien recibido”, añadió.
“Creemos que es un buen momento en el sentido de que pensamos que hay ventanas, porque creemos que este plan estratégico va a ser bien recibido por el mercado”, señaló el presidente de Bankia. No obstante, quiso ser “muy respetuoso” con las decisiones del propietario mayoritario de la entidad, es decir, del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob).
En este sentido, se ha mostró confiado en que el accionista de control del banco, que dispone de más de un 60% de su capital, “hará lo que entienda que es bueno hacer”.
Para Goirigolzarri, el mercado adelantará el valor de los resultados de este plan estratégico, por lo que “no hace falta que se dé el beneficio X para que ese beneficio X esté incorporado a la acción”. “El mercado lo que hace es adelantar el valor”, apuntó.
Por otra parte, el primer ejecutivo de Bankia dejó claro que la entidad trabaja “con la idea de devolver las ayudas” recibidas en el marco de su reestructuración. “Estamos dejándonos la piel con esa idea”, señaló.
“El rescate de Bankia es bueno, con independencia del volumen de ayudas que finalmente se recupere”, aseveró Goirigolzarri, convencido de que “rescatar Bankia fue una buena decisión en todo caso”.
El presidente de la entidad aclaró que el Frob no ha tenido nada que ver en el diseño del plan estratégico, dado que el equipo gestor de Bankia trabaja “desde la profesionalidad de que todos los accionistas son iguales” y “para la optimización del valor”.
En otro orden de cosas, preguntado sobre la intervención en el Congreso del expresidente de Bankia Rodrigo Rato, que calificó de “excesiva” la inyección de capital adicional de 19.000 millones de euros al banco, Goirigolzarri ha señalado que se trata de una cuestión “hueca”.
“Los hechos están claros. Las ayudas no fueron definidas por esta casa ni por el Gobierno español, sino por la Comisión Europea”, apuntó, para después añadir que “dar vueltas a este tema es dar vueltas a una historia que todo el mundo puede contrastar”.
Futuro al frente
De otro lado, el presidente de Bankia se mostró “totalmente vinculado emocionalmente y comprometido” con el proyecto de la entidad “para siempre” mientras tenga la confianza del consejo de administración del banco.
“Estoy totalmente vinculado emocionalmente a este proyecto y estoy comprometido para siempre, y lo digo sin matices”, señaló el primer ejecutivo de Bankia.
Según explicó Goirigolzarri, que fue preguntado en varias ocasiones sobre si terminará su carrera en Bankia o en otra entidad, el ejecutivo está “completamente comprometido” con el proyecto mientras cuente “con la confianza del consejo y el equipo de Bankia”.
Por otra parte, Goirigolzarri descartó “ningún otro movimiento” en relación con la mejora de la eficiencia a través de un recorte de plantilla.
La entidad firmó con la mayoría de los sindicatos de trabajadores un ERE en el marco de la integración de Banco Mare Nostrum (BMN), el cual afectará a un máximo de 2.000 empleados.
Para Goirigolzarri, el ERE tiene la visión de “contemplar los tres años” del plan estratégico y no se espera otra “vuelta de tuerca” en este sentido.
