No es un caso aislado. Algunas promotoras de viviendas asegura que cuando “mandamos a algunos de nuestros clientes a pedir financiación a un banco, vuelven para echarse atrás en la compra que querían hacer con nosotros porque en el banco le han hecho una oferta mejor con uno de sus inmuebles”.
Así lo afirma una profesional con experiencia en el mercado inmobiliario de Segovia para quien estas operaciones de bancos y cajas suponen “competencia desleal”. Además, la concesión de créditos ha pasado de una situación “casi de irresponsabilidad”, según apunta otro especialista “a la actual en la que todo son trabas y limitaciones”.
Ayer mismo, echando un vistazo a los portales especializados de los cinco principales bancos nacionales (Santander, Banesto, BBVA, Popular y Sabadell) y las cinco grandes cajas (La Caixa, Caja Madrid, CAM, Bancaja y Caixa Catalunya) , los más involucrados en el mercado inmobiliario, tres de los primeros y todas las entidades de ahorro disponen en la actualidad de pisos, apartamentos o viviendas unifamiliares en venta en la provincia de Segovia, aunque en total apenas suman una treintena de inmuebles.
Eso sí, algunas en su publicidad llegan a ofrecer descuentos de hasta el 24% (por ejemplo para un apartamento en Carbonero el Mayor).
Entre las entidades de ámbito autonómico es Caja España la que suma más viviendas en venta en la provincia de Segovia, seis, también con promociones, como una rebaja de 11.000 euros en un piso que tenía como precio de partida 136.000 euros.
No es posible contabilizar los inmuebles de Caja Segovia y Caja Rural de Segovia porque no figuran como tal en ningún portal de internet y desde las entidades no se han hecho públicos los datos, con la excepción actualmente de una promoción de viviendas que la primera financia.
Ambas participan eso sí en dos empresas del sector: Edicta Servicios, una sociedad del Grupo Caja Segovia que nace en el año 2005 con dos vertientes, las reparaciones del hogar y servicios de gestión inmobiliaria. Por su parte, Caja Rural de Segovia forma parte, dentro del grupo de Cajas Rurales, de Ruralvía.
El stock de vivienda en posesión de bancos y cajas proviene, en su mayor parte, del intercambio de deuda por activos acordado entre las inmobiliarias y las entidades que financiaron sus promociones antes de la crisis del sector, otra parte son viviendas de ciudadanos que no han podido seguir pagando la hipoteca y el resto viene del negocio que algunas desarrollaban ya a través de filiales inmobiliarias.