La sala de exposiciones de Cultural Cordón alberga hasta el 25 de junio la muestra ‘Bajo el árbol del paraíso. Obra religiosa y profana en la Colección Alejandro Sanz Peinado’, compuesta por una cincuentena de pinturas, esculturas, tapices y artes decorativas, mayoritariamente de los siglos XVI y XVII, en las que se distinguen las procedencias principales de Flandes, Holanda, Italia, Alemania y España.
Se trata de una nueva colección particular, que debido a la calidad y variedad de las piezas reunidas por su propietario harán indispensable celebrar dos exposiciones distintas: la que ahora se muestra, dedicada a la obra religiosa y profana, y la que se celebrará un año después consagrada al retrato, paisaje, naturaleza muerta y pintura histórica y de género.
Conscientes de que lo alegórico y lo simbólico, la espiritualidad, la mitología, la devoción y la sensualidad conforman un gran crisol artístico, en esta exposición conviven iconografías religiosas junto a expresiones culturales hoy secularizadas, pero cuyo relato se sustenta en la creencia, en la fuerza narrativa y en la trascendencia estética.
Algunas de las obras que componen esta exposición conllevan el valor añadido de su singularidad patrimonial. Así sucede con ‘San Jerónimo en su estudio’, tabla de gran interés y extraordinaria calidad perteneciente a Jan Metsys, con ‘San Juan Bautista niño’, retrato de singular hermosura y delicadeza pintado por el maestro de Brujas Jacob van Oost, el viejo, con ‘La Virgen con el Niño Jesús y san Juanito’, bellísima composición debida a Abraham Janssens, el más importante pintor flamenco de Amberes hasta que Rubens regresó de Italia en 1608, con la ‘Sagrada Familia’ atribuida al propio Pedro Pablo Rubens, una composición perteneciente a su producción más madura, o con ‘La visión de san Francisco de Paula’ debido al pincel de Michaelina Woutiers, una de las mujeres pintoras más reivindicadas hoy y de la que solo se conocen, con esta, dos obras en España.
A ellas debe sumarse la fantástica tabla de ‘San Miguel venciendo al demonio’ de Pedro Delgado, obra única y de gran calidad, unánimemente elogiada y considerada entre las más importantes del renacimiento español; la impactante escultura de autor aún no conocido de ‘San Jerónimo penitente’, del siglo XVI, o la pintura de José de Ribera dedicada a san Francisco, tenida por los especialistas italianos como de lo mejor y más representativo de su producción, constituyen solo un pequeño ramillete de cuanto se podrá contemplar en el espacio de Cultural Cordón.
