El Ayuntamiento de Segovia, a través de la Concejalía de Obras, Servicios e Infraestructuras, ha asumido la restauración integral de la fuente situada en la glorieta de la plaza de la Universidad, junto al Campus María Zambrano de la UVa.
Se trata de una fuente que fue inaugurada en la segunda mitad de la década de los noventa del siglo pasado pero que lleva muchos años sin funcionar. Los responsables municipales esperan que la reparación de la estructura y sistemas de la fuente esté finalizada para la temporada navideña.
Se trata de una intervención largamente demandada por los vecinos y comerciantes de esta zona del barrio de Santa Eulalia.
Inauguración
La fuente, con forma de pirámide, se inauguró a finales de enero 1997 y fue diseñada por el entonces arquitecto municipal Federico Coullaut-Valera. Su coste rondó los diez millones de pesetas.
La rotonda sobre la que está situada tiene 20 metros de diámetro, mientras que el de la fuente, con una altura de 2,15 metros, es de 8 metros. Consta de 36 salidas para el agua y similar número de focos de luz.
Dispone además de un sistema de control para medir la presencia de aire y suspender el funcionamiento de los chorros de agua cuando lo detecta. La fuente fue el remate a la remodelación de la plaza, entonces del Alto de los Leones de Castilla —y que anteriormente se conocía como plaza del Quinto—, que llevó a cabo la constructora segoviana Conalber, con un presupuesto de 27 millones de pesetas.
Se trata de una de las múltiples rotondas que poblaron la ciudad, hasta entonces prácticamente libre de este sistema de distribución del tráfico en los cruces, durante la etapa llamada popularmente ‘ramoniana’, por el nombre del alcalde del Partido Popular Ramón Escobar.
